La CSI quiere aprovechar la oportunidad del Día Mundial contra el Racismo y la Xenofobia para recordar que el racismo y la xenofobia constituyen violaciones graves a los derechos humanos, y para instar a gobiernos, empleadores y sindicatos de todo el mundo a que promuevan el respeto por la diversidad y la interacción multicultural, a que luchen activamente contra la discriminación en base al origen étnico, la nacionalidad o el color de la piel, y a que estén aún más alertas en estos tiempos de crisis económica mundial que generan caldo de cultivo para expresiones extremas e ilimitadas de racismo y exclusión social así como una mayor tolerancia social al respecto.