La CSI ha calificado de inhumana la oleada de violencia que se ha desatado en la mina de platino de Lonmin en Marikana, Sudáfrica, donde nada menos que 36 personas murieron ayer cuando la policía abrió el fuego contra los mineros en huelga. Diez personas habían fallecido anteriormente la semana pasada, conforme se fue intensificando la violencia en la mina.