Decenas de miles de manifestantes pacíficos han protestado hoy en las calles de El Cairo y en muchas otras ciudades de Egipto, como Alejandría, Asuán, Mahallah e Ismailia. Al igual que en la revuelta popular de Túnez, denunciaban la corrupción, la pobreza, el elevado coste de la vida y la brutalidad policial, exigiendo reformas sociales y políticas.