¿Cómo pasar de estar en conflicto permanente a decidir de salir todos ganando? Diez años de construcción de diálogo social en Perú

Durante 10 años (2012-2022), Mondiaal FNV ha apoyado y facilitado la colaboración entre sindicatos y empleadores en Perú para establecer el diálogo social. Esta iniciativa ha generado un cambio sistémico, llevando a empleados y empleadores a realizar consultas periódicas y llegar a acuerdos.

* Foto - Los actores clave: Carmela Sifuentes (CGTP), Samuel Machacuay (MondiaalFNV) y Luis Salazar (SNI).

Todo comenzó con un par de líderes, uno de los sindicatos y otro del lado de los empleadores, que estaban abiertos a construir un diálogo sostenible. Trabajando junto con Mondiaal FNV, surgió la idea de aprender sobre el modelo neerlandés de diálogo social, comúnmente conocido como el método pólder”.

La Confederación General de los Trabajadores del Perú (CGTP) junto con Mondiaal FNV, invitó a personas que representan tanto a empleadores como a trabajadores a una visita de estudio a los Países Bajos. Todos los participantes fueron invitados en calidad de peruanos con el deseo compartido de contribuir al desarrollo del país.

”Desde el principio noté que los empleadores ya estaban adoptando un enfoque conciliatorio: invitaron a todos a la sala de espera del aeropuerto, y todos estaban deseosos de sentarse juntos en el avión", recordó Samuel Machacuay, el consultor local de Mondiaal FNV en Perú, quien ha sido la fuerza impulsora en este proceso.

Este fue el comienzo de un viaje notable, durante el cual el grupo aprendió sobre el modelo neerlandés entre bastidores. Fue en este punto que Carmela Sifuentes (CGTP) y Luis Salazar, representantes de la organización patronal Sociedad Nacional de Industrias (SNI), tomaron la decisión de cooperar y establecer una fundación laboral.

La confianza fue clave durante todo el proceso

"Perú no tiene una cultura de diálogo. Por naturaleza, no confiamos el uno en el otro. Sabía que algo tenía que cambiar, pero parecía un desafío enorme transformar esta desconfianza fundamental en una relación sostenible entre ambas partes", explicó Samuel Machacuay.

La confianza desempeñó un papel crucial en el desarrollo de un diálogo social estructural duradero. La confianza inicial entre Sifuentes y Salazar se extendió gradualmente a todo el sistema. En busca de este objetivo, Mondiaal FNV facilitó discusiones informales entre empleadores y empleados, implementó prácticas de negociación de ganar-ganar y proporcionó capacitación a líderes sindicales que, a su vez, capacitaron a otros. Las consultas esporádicas evolucionaron hacia sesiones regulares, culminando en el establecimiento de la Asociación para el Trabajo" – la variante peruana de la Fundación Laboral Neerlandesa.

Esta iniciativa ha contribuido significativamente a cambios transformadores en Perú. Lo que antes era una sociedad donde la desconfianza servía como base inicial para las interacciones entre socios sociales ha evolucionado. Hoy, en numerosos lugares, prevalece un auténtico diálogo social entre empleadores y empleados. "El viaje del diálogo social aún es largo, donde aún queda mucho por mejorar, pero tengo plena confianza en que los jóvenes empleadores y empleados ahora están bien capacitados para asumir el control y asegurar un futuro aún mejor para los empleados, las empresas y nuestro país también", concluyó Samuel Machacuay.

Geraldine: un ejemplo práctico de diálogo social exitoso en Perú

Geraldine es una de las personas que ha dado forma al cambio en las relaciones laborales en su empresa. Trabaja para una empresa farmacéutica de la cual fue despedida una vez por fundar un sindicato para luchar contra las precarias condiciones laborales en la empresa.

"Fue un momento difícil para mí: estaba en shock por perder mi trabajo, era un gran desafío llegar a fin de mes sin empleo. Pero luché por recuperar mi trabajo y lo logré, y también seguí todo tipo de cursos de formación, ¡incluido el curso de Mondiaal FNV en diálogo social! Fue una experiencia tremendamente enriquecedora".

Ahora que el diálogo social funciona en la empresa, los trabajadores han podido participar en negociaciones colectivas en las que Geraldine pudo poner en práctica todo lo que había aprendido.

"Tuvimos buenos resultados. Logramos mucho, por ejemplo, un bono de cinco años, una contribución a los costos de formación y un salario más alto. Pero lo más importante de todo es que ahora tenemos un diálogo permanente con el empleador en forma de una consulta mensual. La atmósfera en el trabajo es ahora totalmente diferente".