Bruselas, 9 de septiembre de 2008: La CSI condena duramente el asesinato de dos miembros sindicales en Nepal, y la excesiva violencia de la que posteriormente hizo uso la policía nepalí contra manifestantes sindicales pacíficos, el miércoles 3 de septiembre.

La policía disparó contra Kebal Raut y Hare Ram Yadav en un incidente que se produjo después de que trabajadores de diversas fábricas en el distrito de Bara se hubieran unido a los trabajadores de la fábrica Narayani Rolling Mills en una acción contra la dirección de la empresa. La acción fue lanzada por el sindicato Nepal Independent Chemical and Iron Workers’ Union (NICIWU) – afiliada de la Federación General de Sindicatos de Nepal (GEFONT) que es a su vez afiliada de la CSI – y a la que más tarde se sumaron trabajadores de otros sindicatos, entre ellos el Nepal Trade Union Congress-Independent (NTUC-I), también afiliado a la CSI.

Durante una protesta pacífica en Katmandú, la policía arrestó a 80 líderes sindicales, incluido Santosh Rajyamajhi, Secretario General del sindicato de trabajadores United Telecom Ltd (UTL). La protesta se llevó a cabo en apoyo a una reivindicación sindical para poner fin al sistema de contratos temporales, exigir mejores condiciones de trabajo y aplicar correctamente la legislación laboral y sindical de Nepal. Durante los arrestos, la policía recurrió a la violencia y muchos de los trabajadores resultaron lesionados incluso con herida de bala. Los trabajadores fueron detenidos en la comisaría de Mahendra y puestos en libertad por la noche.

En una carta enviada a las autoridades, la CSI insta al gobierno a garantizar que las fuerzas de seguridad nepalíes se abstengan de hacer uso de la violencia, que se proporcione una compensación justa a las familias de los trabajadores fallecidos y que se satisfagan las reivindicaciones de los trabajadores.

“La represión sistemática contra los sindicalistas tiene que cesar”, dijo Guy Ryder, Secretario General de la CSI. “Una recién establecida democracia, como es la de Nepal, no debe consentir semejante violencia, sobre todo porque Nepal está obligado a respetar las normas fundamentales del trabajo en virtud de su membresía a la Organización Internacional del Trabajo (OIT)”, añadió.

La CSI representa a 168 millones de trabajadores de 155 países, y cuenta con 311 afiliadas.

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