Ambos han sido condenados a cuatro años de prisión con suspensión de la pena; además, no podrán ocupar altos cargos durante los próximos cinco años. También recibieron una multa de 23.000 dólares estadounidenses y se les ordenó pagar los costes del juicio.
“Se trata de un descarado caso antisindical sin fundamento en el estado de derecho. Esperamos que prospere el recurso contra estas sentencias injustas”, dijo la Secretaria General de la CSI, Sharan Burrow.
La federación sindical internacional IndustriALL, a la que está afiliado REP, ha seguido de cerca el caso.