La OIT ha solicitado al Gobierno en repetidas ocasiones que respete el derecho de asociación del KTU, así como su derecho a determinar sus propios criterios de afiliación. Pero debido a que el sindicato decidió incluir entre sus filas a los sindicalistas despedidos, el Gobierno le ha retirado el reconocimiento jurídico. Además el Gobierno se ha negado recientemente, y por cuarta vez, a registrar el Korean Government Employees Union (KGEU) por el mismo motivo.
“La Administración Park ha demostrado en poco tiempo sus credenciales antisindicales al atacar los derechos fundamentales de los docentes y de los funcionarios del Gobierno. Hacemos un llamamiento a todos los Gobiernos para que presionen con carácter de urgencia al Gobierno coreano a fin de que respete el Derecho internacional y restablezca de inmediato la condición jurídica del KTU.” Dijo Sharan Burrow, secretaria general de la CSI