La OCDE ha revisado a la baja sus pronósticos de crecimiento de mayo y estima que Italia, Francia y el Reino Unido se encuentran ya en recesión, mientras que se anticipa que Alemania lo esté en los dos últimos trimestres de 2012. En este contexto, se prevé que el desempleo vuelva a aumentar “con efectos adversos en los ingresos, el crecimiento, la confianza y la actividad”.

En sus observaciones sobre las cifras, Sharan Burrow, Secretaria General de la Confederación Sindical Internacional, dijo: “Esta nueva recesión – sobre todo en Europa – demuestra de una vez por todas que las severas políticas de austeridad apoyadas por el FMI, el Banco Central Europeo y la Comisión Europea están condenadas al fracaso.”

En sus observaciones sobre las recomendaciones de políticas, John Evans, Secretario General de la Comisión Sindical Consultiva ante la OCDE, dijo que “en la Cumbre del G20 en Los Cabos los Gobiernos se comprometieron a apoyar las demandas si la economía mundial se debilitaba. La economía se ha debilitado y ahora tienen que cumplir sus promesas y estimular la creación de empleo y la inversión”.