En el Instituto Nacional de Cartografía (INC), a una quincena de trabajadoras y trabajadores les suspendieron los contratos por haber participado en una huelga que fue convocada por representantes del personal con el objetivo de conseguir la firma de contratos de trabajo para regularizar la situación de los empleados. Según la información que ha recibido la CSI, la Société Sucrière du Cameroun (SOSUCAM), respaldada por las autoridades prefectorales del Departamento de la Haute Sanaga, ha interpuesto un proceso judicial contra tres trabajadores, también por haber hecho huelga.
Por otra parte, Micheline Banbe, Vicepresidenta de la sección sindical responsable de las mujeres y Secretaria Adjunta para asuntos jurídicos de la oficina regional de la CSAC en Douala ha sido despedida injustamente de la empresa Orange Cameroun en la que trabajaba. La sindicalista había sido presentada en la lista de la sección sindical en las últimas elecciones de delegados de personal en abril de 2011. Desde entonces el empleador no ha dejado de apuntar a todas las personas de dicha lista, así como a todas aquellas seleccionadas por la sección sindical, descalificándolas y dando preferencia a los trabajadores no sindicalizados.
“Es intolerable que los trabajadores que ejercen sus actividades sindicales legítimas sean tratados de esta manera”, explica Sharan Burrow, Secretaria General de la CSI. “El derecho a organizarse, el derecho a la negociación colectiva y el derecho de huelga son derechos fundamentales para el buen funcionamiento de la democracia.”
En una carta dirigida a las autoridades camerunesas, la CSI solicita al Presidente Paul Biya que haga todo lo posible para que los trabajadores recuperen sus derechos cuanto antes y que los Convenios fundamentales de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), entre otros los relativos a la libertad sindical y la negociación colectiva, sean respetados en Camerún.
