Al proyectar el futuro crecimiento económico, el Banco Mundial reconoce que “desgraciadamente es poco probable que estos índices de crecimiento sean lo suficientemente rápidos como para eliminar el desempleo.” La Secretaria General de la CSI Sharan Burrow observó: “La promoción que hace el informe de la austeridad fiscal en realidad socava el crecimiento y los puestos de trabajo.”
“El Banco Mundial debería solicitar, en su lugar, una recuperación económica inclusiva basada en unos salarios más altos y una protección social más fuerte”, añadió Burrow. Mientras que el Anexo Regional del informe señala que los salarios crecientes contribuyeron al crecimiento en determinados países, el informe principal sólo menciona los salarios a la hora de apoyar una “reducción de los índices de indemnización compensatoria y los márgenes de beneficios salariales”. Apunta específicamente a las pensiones públicas. “Parece sumamente ilógico que el informe promueva unos salarios y beneficios de protección social reducidos cuando los informes de la OIT demuestran que los salarios reales están decayendo o estancándose en muchos países y los análisis por país del informe muestran que los salarios crecientes están de hecho contribuyendo a las recuperaciones económicas en algunos países,” dijo Burrow.
Por otro lado, el movimiento sindical apoya enérgicamente la recomendación del Banco Mundial de expandir los marcos regulatorios para englobar los fondos de cobertura y derivativos que anteriormente escaparon a una supervisión adecuada. El informe reconoce incluso unos “impuestos en los holdings extranjeros a corto plazo” como un tipo legítimo de control de capitales. Estos impuestos deberían ser parte de una tasa a las transacciones financieras mucho más amplia, que frenara la especulación financiera, ayudara a restaurar las finanzas de los gobiernos y generara unos recursos vitales para un crecimiento y desarrollo sostenibles.
“Como los mercados financieros tienen tanto poder sobre los gobiernos, todavía hay que encargarse de la tarea principal de transformar la economía mundial. Los gobiernos tienen que actuar juntos al respecto, con determinación y sin más demora”, dijo Burrow, quien encabezará una delegación de más de 60 líderes sindicales de todo el mundo durante los tres días de reuniones que mantendrán con los máximos directivos del Banco Mundial y el FMI en Washington la próxima semana.
