La dirigente sindical era Subcoordinadora de la Comisión de Asesoría Jurídica de la Unión Sindical de Trabajadores de Guatemala (UNSITRAGUA-HISTORICA), afiliada a la CSI, formaba parte del Grupo de Organizadores de Guatemala y era miembro del Equipo Jurídico Continental de la Confederación Sindical de las Américas (CSA).
La CSI exhortó al Presidente Morales a tomar las medidas necesarias para detener de una vez por todas la ola de asesinatos de dirigentes sindicales y de violencia generalizada que impera en el país. Este asesinato refleja el clima de terror y de persecución que perdura en Guatemala. La CSI, junta con el movimiento sindical guatemalteco, exige la inmediata intervención del Ministerio Público y la Comisión Contra la Impunidad en Guatemala (CICIG), y que se inicien las investigaciones pertinentes para dar con los responsables y que se les castigue de conformidad con la ley.
“Es fundamental hacer todo lo posible para encontrar inmediatamente a los responsables de este nuevo acto intolerable”, dijo Sharan Burrow, Secretaria General de la CSI. “Resulta esencial que se lleve a cabo una rápida y exhaustiva investigación a fin de detener a los culpables y aplicarles las sanciones previstas por la ley”.