El pueblo de la economía informal

Hann Montagne, un pequeño barrio en la periferia de Dakar.

Uno más uno hacen tres

Hace 10 años todavía no se podía hablar ni por asomo de ningún tipo de actividad económica. El único empleo que existía se resumía en unos cuantos trabajos informales de poca monta. Eran más que nada “apaños”... Con la llegada de nuestra asociada CNTS (Confédération National des Travailleurs du Sénégal) las cosas cambiaron: gracias a una serie de acciones concretas de sensibilización, los trabajadores de la economía informal pudieron comprender que organizarse y trabajar como parte de una red podía resultarles ventajoso; comprendieron que tenían derechos en materia de trabajo y que el sindicato les podía ayudar a reivindicarlos.

Los habitantes empezaron a organizarse poco a poco, a crear asociaciones de oficios, en las cuales los artesanos podían reunirse para intercambiar información y experiencias, identificar juntos los obstáculos para la resolución de sus problemas y negociar con las autoridades locales.

Gracias a una serie de capacitaciones bien definidas, consiguieron mejorar sus técnicas en el plano de la negociación, adquirieron conocimientos sobre sus derechos en el trabajo y fueron informados de las características específicas vinculadas a la economía informal. La creación de puntos de venta centrales les permitió adquirir productos a granel y obtener por tanto mejores precios. Además, la colaboración entre los diferentes grupos favoreció la generación de sinergias.

Una red social indispensable

Para ilustrar esta necesidad, podemos citar los pequeños huertos urbanos que se encuentran en tejados o baldíos, constituidos de restos de cacahuetes o de otros frutos, y que permiten cosechar hierbas de todo tipo, que a continuación se secan, se empaquetan y se venden en lugares específicos. Los beneficios de las ventas se reparten en su mayoría entre los propios trabajadores, pero una parte se reserva para mantener un fondo de solidaridad destinado a ayudar a las personas que sufren enfermedades o que tienen que afrontar circunstancias inesperadas. El resultado es una cadena de actividad económica donde la salida de la una sirve de entrada a la otra.

Gracias a esta estrategia los trabajadores de la industria informal pueden entender mejor las ventajas que se derivan de la sindicalización. Permite asimismo que estas personas, que viven en unas condiciones extremadamente precarias, encuentren por fin el camino hacia un sindicato que pueda garantizarles protección a escala local, regional y nacional, pudiendo mantener no obstante su autonomía. En definitiva se consigue que estas personas sean reconocidas como “trabajadores integrales”, lo que por tanto incluye también los derechos y los deberes que acompañan a este estatus.

By Beweging voor Internationale Solidariteit / Mouvement pour la Solidarité Internationale