Colombia: Asesinatos y amenazas no disminuyen

Una vez más, la Confederación Sindical Internacional vuelve a constatar que los asesinatos e intentos de asesinato, atentados y amenazas de muerte que sufre permanentemente el movimiento sindical colombiano no cesan en Colombia.

Bruselas, 18 de junio de 2008: Una vez más, la Confederación Sindical Internacional vuelve a constatar que los asesinatos e intentos de asesinato, atentados y amenazas de muerte que sufre permanentemente el movimiento sindical colombiano no cesan en Colombia.

El 12 de marzo fue asesinado José Gregorio Astros Amaya, Comandante de Vigilancia de la Penitenciaría de Cartago Valle y miembro de la Junta Directiva de Asociación sindical de empleados del IMPEC (ASEINPEC)-Cartago. El 22 de marzo, Adolfo González Montes, dirigente sindical del Sindicato Nacional de los Trabajadores de la Industria del Carbón (SINTRACARBON), Seccional Barrancas, fue torturado y luego asesinado en su residencia. El 16 de abril, el dirigente sindical de SINDESENA, Jesús Heberto Caballero fue asesinado.

El 1 de mayo, José Domingo Florez, trabajador de la embotelladora de Coca Cola en Bucaramanga recibió una amenaza de muerte. Junto con Luis Eduardo Garcia, ambos dirigentes de SINALTRAINAL vienen recibiendo desde hace meses amenazas, al igual que otros dirigentes de SINALTRAINAL en la ciudad de Bucaramanga. El 23 de abril, al parecer dos policías vestidos de civil protegidos por sus compañeros uniformados, en un confuso incidente intentaron agredir a Jorge Gamboa, Presidente Nacional de la Unión Sindical Obrera–USO. Daniel Rico Serpa, Secretario General de la Junta Nacional de la USO en la ciudad de Cartagena y Rubén Caballero Ariza, Presidente de uno de los sindicatos del Cerrejón en Valledupar Cesar también fueron objeto de repetidas amenazas de muerte durante el mes de mayo.

En una carta enviada al Presidente Uribe, la CSI exhorta a las autoridades de Colombia a llevar a cabo una investigación exhaustiva de todos los delitos cometidos y le ruega, en particular, desplegar las medidas de seguridad necesarias a fin de que no se cumplan las amenazas de asesinatos proferidas contra
el movimiento sindical colombiano. La CSI también va a mandar una queja oficial al Comité de Libertad Sindical de la Oficina Internacional del Trabajo (OIT).

“Es indispensable acabar con este clima de violencia, dijo Guy Ryder Secretario General de la CSI. “Es menester tomar medidas urgentes y llevar a cabo una investigación exhaustiva de los delitos cometidos casi diariamente contra los sindicalistas a fin de que el movimiento sindical colombiano pueda ejercer sus derechos fundamentales sin poner en peligro sus vidas. “


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