El más reciente de una serie de ataques contra las libertades democráticas fue la detención, el 24 de agosto, de un grupo de jóvenes líderes sindicales estudiantiles después de una protesta por el cierre de la Universidad de Swazilandia.
Las organizaciones sindicales, entre las que se cuentan las de Bélgica, Sudáfrica y el Reino Unido, entregarán cartas a los embajadores de Swazilandia en su país exhortando al rey Mswati III a implantar en su reino plenos derechos humanos y sindicales. Mswati es uno de los últimos monarcas absolutos del mundo.
De acuerdo con las palabras del Secretario General Adjunto de la CSI Wellington Chibebe, en una protesta frente a la Embajada de Swazilandia en Bruselas organizada por la CSI y los sindicatos belgas: “Apoyamos a los trabajadores y trabajadoras de Swazilandia, quienes exigen una reforma constitucional, una democracia multipartidista y el pleno respeto de los derechos sindicales.”
"El tema de la democracia no puede ignorarse.”
“La cuestión no consiste en saber si habrá o no una reforma, sino en saber cuándo.”
"Para los derechos de los trabajadores y trabajadoras, el momento es ahora."