7 de octubre, Jornada Mundial por el Trabajo Decente – Poner el mundo a trabajar

A cuatro semanas de la Jornada Mundial por el Trabajo Decente que se celebrará este 7 de octubre, Guy Ryder, Secretario General de la CSI, ha publicado un llamado a la acción titulado “Poner el mundo a trabajar” con el fin de fomentar la participación en la movilización mundial para abordar la crisis económica y de empleo global y asegurar una reforma fundamental de la economía mundial. Los sindicatos de todas las regiones se están preparando para las actividades previstas para el 7 de octubre, y organizaciones de más de 30 países ya han puesto información sobre sus eventos en el sitio web especial

“La crisis, provocada por la especulación, la codicia y una regulación financiera poco estricta, está costando millones de puestos de trabajo y causando estragos en la vida de trabajadores y trabajadoras de todos los países. Millones de trabajadores se ven atrapados en empleos precarios, y en muchos países se están restringiendo aún más los derechos fundamentales de representación sindical y negociación colectiva. Las pérdidas de empleos van a seguir produciéndose en 2010, y quizás se tarde mucho en volver a los niveles de empleo de antes de la crisis – a no ser que los gobiernos actúen unidos y con determinación para desarrollar inversiones productivas y asegurar que los mercados financieros estén correctamente regulados”, dijo Ryder.

Los líderes de las mayores economías del mundo se reunirán en la Cumbre del G20 en Pittsburg el día 25 de septiembre, justo dos semanas antes de la Jornada Mundial por el Trabajo Decente, por lo que el movimiento sindical internacional está presionando con fuerza para que se apliquen medidas que garanticen el respeto global de los derechos fundamentales en el trabajo y para que se logre un crecimiento económico sostenible, reformas financieras eficaces, desarrollo y justicia social. La acción respecto al cambio climático, a través de inversiones en empleos verdes y una “transición justa” para los trabajadores y trabajadoras afectados por el viraje hacia una economía con bajas emisiones de carbono, se encuentra también entre las máximas prioridades sindicales.

“La declaración del G20 publicada a raíz de la Cumbre de Londres celebrada en abril, ha abierto camino a progresos reales con relación a estas cuestiones, pero el movimiento ha sido lento y existen serias preocupaciones de que los gobiernos se vean influenciados por intereses limitados, pero poderosos, que piden volver a “la rutina de siempre”. Estamos decididos a evitar que esto ocurra, y una delegación de líderes sindicalistas internacionales de alto nivel estará presente en Pittsburg para insistir en nuestros argumentos con los presidentes y primeros ministros que asistan a la cumbre,” añadió Ryder.

Los eventos del 7 de octubre serán una oportunidad vital para conseguir apoyo público para el programa sindical de reformas globales, y para recordar a los gobiernos sus responsabilidades de gobernar en el interés de la mayoría en vez de volver a las políticas de libre mercado no regulado que condujeron a la crisis financiera.

El 7 de octubre del año pasado, se organizaron más de 600 actividades para la Jornada Mundial por el Trabajo Decente por parte de 216 organizaciones sindicales nacionales de 130 países, y cientos de miles de personas participaron en concentraciones, reuniones en lugares de trabajo y eventos especiales a lo largo del día.