Este mes está previsto que continúen los juicios en el Tribunal Supremo contra el Congreso de Sindicatos Democráticos de Belarús (BKDP, por sus siglas en bielorruso) y sus organizaciones afiliadas: el Sindicato Independiente de Belarús (BNP), el Sindicato de Trabajadores de la Radio y la Electrónica (REP), el Sindicato Libre de Belarús (SPB) y el Sindicato Libre de Trabajadores del Metal (SPM). El Gobierno quiere que el BKDP y a todos los sindicatos independientes sean declarados “organizaciones extremistas” para tratar de poner fin a sus actividades tras el arresto de dirigentes y activistas.
La CSI tiene entendido que los procesos penales contra los dirigentes sindicales detenidos también comenzarán en julio.
La secretaria general de la CIS, Sharan Burrow, ha declarado: “Estos juicios falsos son especialmente preocupantes. Las autoridades y la judicatura bielorrusas han demostrado un desprecio absoluto por las garantías procesales y los derechos básicos de los trabajadores y las trabajadoras para intentar erradicar el movimiento sindical independiente.
“Todos los Gobiernos y organismos internacionales con influencia en Belarús deben intervenir y pedir a las autoridades que pongan fin a este acoso judicial contra los sindicatos y sus líderes. Esto significa también la puesta en libertad de todos los dirigentes y miembros de los sindicatos detenidos por llevar a cabo actividades sindicales legítimas, y la retirada de todos los cargos relacionados.
“Lo más urgente es que en todos los juicios haya delegados de la OIT, en calidad de observadores, que puedan visitar a los sindicalistas detenidos para verificar su estado de salud y las condiciones de arresto y detención en las que se encuentran”.