En febrero de 2020, la Oficina del Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos publicó una base de datos de empresas, pero todavía no se ha actualizado ni se ha designado un grupo de expertos que supervise el proceso, a pesar de que la resolución 31/36 así lo requería.

La Secretaria General de la CSI Sharan Burrow declaró: “Los aniversarios suelen ser momentos de celebración, pero en este caso no es así. El retraso en la actualización de esta base de datos es imperdonable y la Alta Comisionada de la ONU para los Derechos Humanos, Michelle Bachelet, tiene que dar prioridad a este asunto para que salga del estancamiento”.

El Consejo de Derechos Humanos de la ONU se reunirá el 28 de febrero y la CSI está exigiendo que la base de datos sea una prioridad en la sesión.

“Esta base de datos es demasiado importante como para que la dejen metida en un cajón. La ONU asegura que sirve para desenmascarar a las empresas que, directa o indirectamente, han permitido, facilitado o se han beneficiado de la construcción y crecimiento de los asentamientos ilegales”.

“Sin embargo, hay empresas que conviene borrar de la lista porque ya han dejado de trabajar en los asentamientos ilegales y otras compañías que deberían figurar en ella. No conviene a nadie que esta base de datos esté desactualizada. Le rogamos que firme la siguiente petición, ya que mantener al día esta base de datos genera un incentivo y crea un efecto disuasorio para las empresas que pretenden participar en la industria israelí de los asentamientos ilegales”, concluyó Sharan Burrow.

Más de 2600 personas ya han firmado esta petición. Incluya su nombre aquí.

Israel ha construido decenas de miles de viviendas en territorios palestinos contraviniendo el derecho internacional y las empresas que operan en dichos asentamientos son fundamentales para su continuidad.