Hong Kong: la HKCTU, afiliada a la CSI, se disuelve

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La CSI está profundamente consternada por la decisión de su afiliada Hong Kong Confederation of Trade Unions (HKCTU) de iniciar el procedimiento para disolverse.

En los últimos meses, la HKCTU y sus organizaciones miembros han sufrido ataques, intimidaciones y acusaciones sin precedentes en virtud de la Ley de Seguridad Nacional. La seguridad personal de los dirigentes sindicales también se ha visto amenazada.

La decisión de la HKCTU se inscribe en el proceso de desmantelamiento de la sociedad civil que está teniendo lugar en Hong Kong desde que se promulgó la Ley de Seguridad Nacional en julio del año pasado.

Los expertos en derechos humanos de la ONU han declarado que la ley china sobre la “Salvaguardia de la Seguridad Nacional en la Región Administrativa Especial de Hong Kong” no se ajusta a los tratados internacionales de derechos humanos. El uso de terminología en materia de seguridad nacional en la ley penaliza determinados derechos que se recogen en el Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos.

Una historia que nos llena de orgullo

Sharan Burrow, secretaria general de la CSI, ha declarado: “Desde su fundación, hace más de 30 años, la HKCTU ha contribuido enormemente a mejorar la vida de la ciudadanía de Hong Kong consiguiendo avances en la legislación laboral, los salarios y la protección social.

“Ha respaldado a trabajadores y trabajadoras de otros países sometidos a represión. Ahora no tiene más opción que disolverse, privando a los trabajadores de protecciones vitales garantizadas en el derecho internacional.

“Condenamos la persecución y el encarcelamiento de dirigentes sindicales, así como las recientes amenazas contra los sindicalistas de Hong Kong. Las autoridades chinas también han alegado que la afiliación de la HKCTU a la CSI y su legítima cooperación con sindicatos de otros países implican colusión, a pesar de que la afiliación y la cooperación internacionales están protegidas por el Convenio 87 de la OIT sobre la libertad sindical.

“Resulta sumamente preocupante que la actual campaña desplegada por los medios de comunicación estatales chinos para calificar a los sindicatos nacionales e internacionales, a las organizaciones de defensa del trabajo y a los activistas como agentes extranjeros en virtud del artículo 43 de la Ley de Seguridad Nacional, obligue a otros sindicatos y organizaciones laborales a cortar sus vínculos con sus homólogos internacionales”.

Libertades fundamentales

Desde agosto, el sindicato de docentes Hong Kong Professional Teachers’ Union, el sindicato de logopedas General Union of Hong Kong Speech Therapists y la organización de defensa laboral Asia Monitor Resource Center con sede en Hong Kong, han decidido disolverse.

El secretario general de la HKCTU, Lee Cheuk Yan, que está cumpliendo diversas penas de cárcel por participar en asambleas públicas, se enfrenta a nuevas acusaciones de incitación a la subversión en su calidad de presidente de la Hong Kong Alliance in Support of the Patriotic Democratic Movements in China (Alianza de Hong Kong en Apoyo de los Movimientos Patrióticos Democráticos de China). Esta última ha sido la principal organización que estableció el principio de “un país, dos sistemas” en Hong Kong, con arreglo al cual las diferentes opiniones, diversidades y libertades fundamentales deben respetarse.

En junio de este año, la Comisión de Aplicación de Normas de la OIT solicitó a las autoridades la adopción de todas las medidas necesarias para seguir garantizando el derecho de las organizaciones de trabajadores a organizar sus actividades de acuerdo con el Convenio 87 de la OIT. El junio de 2021, el Comité de Libertad Sindical (CLS) de la OIT solicitó al Gobierno garantías de que los sindicalistas pudieran ejercer sus actividades sin verse sometidos a violencia ni intimidación, en el marco de un sistema que garantizara el respeto efectivo de las libertades civiles.

La CSI solicita a las autoridades chinas y de Hong Kong que se abstengan de perseguir e intimidar a los sindicalistas y defensores de las libertades fundamentales, y que pongan en libertad a aquellos que han sido encarcelados.

“Este año, en la OIT, las autoridades chinas se comprometieron a respetar las normas de la OIT aplicables a Hong Kong, pero ha sido una promesa vacía. La CSI y todo el movimiento sindical internacional se solidarizan con sus compañeras y compañeros de Hong Kong, y seguiremos luchando para que se respeten sus derechos fundamentales”, ha concluido Sharan Burrow.