Incendio en la fábrica Hashem Foods: el Gobierno de Bangladesh debe lleva a cabo una investigación

photo: Munir Uz zaman AFP

La Confederación Sindical Internacional (CSI) apoya la petición para que se lleve a cabo una investigación pública independiente con relación al devastador incendio que se ha producido en la fábrica Hashem Foods en Rupganj (Bangladesh).

Un número indeterminado de personas han perdido la vida en el incendio. La policía y los bomberos han confirmado que las salidas de la fábrica estaban bloqueadas y que había niños trabajando en ella.

Sharan Burrow, secretaria general de la CSI, ha declarado: “En primer lugar, queremos transmitir nuestras condolencias a todos los afectados por esta tragedia. Estamos consternados por las muertes y por los informes según los cuales muchas personas no pudieron escapar porque las puertas y las cancelas estaban cerradas. Los trabajadores heridos han de recibir tratamiento médico, además de ser plenamente indemnizados, junto con sus familias, sin demora.

“Es terrible que hubiera niños trabajando allí. Debido a la naturaleza oculta del trabajo infantil, puede que nunca sepamos cuántos niños perdieron la vida en el incendio, ni tampoco sus nombres.

“La CSI se solidariza con nuestra organización afiliada ITUC Bangladesh Council y con la UITA en su lucha por la justicia para las víctimas de este desastre”.

Demandas claras

La CSI apoya al Sajeeb Group Workers’ Justice Committee, un comité de justicia para los trabajadores formado por los familiares de las víctimas para exigir indemnizaciones y evitar que se produzcan tragedias similares.

Además, la CSI respalda la petición de la UITA y del ITUC Bangladesh Council para que se lleve a cabo una investigación pública independiente que abarque:

  • la negligencia criminal por parte del propietario de la fábrica que permitió la existencia de unas condiciones de trabajo mortales;
  • cómo la empresa pudo ignorar los reglamentos de salud y seguridad y la normativa contra incendios;
  • por qué ninguna inspección de la fábrica había identificado las condiciones letales presentes en el ámbito laboral; y
  • la prevalencia del trabajo infantil en la fábrica, que infringe el Convenio 138 de la OIT y los Principios y Derechos Fundamentales en el Trabajo.

“Apoyamos la petición para que se lleven a cabo inspecciones urgentes en todas las fábricas de alimentos de Bangladesh con objeto de comprobar las condiciones en materia de seguridad y si se está abusando de niños mediante el uso de mano de obra infantil.

“La investigación pública independiente y los resultados de la misma deberán incluir la aplicación expedita de una hoja de ruta de la reforma laboral derivada de la denuncia presentada en virtud del artículo 26 de la Constitución de la OIT contra el Gobierno de Bangladesh. Este incendio nos recuerda nuevamente que la OIT debe reconocer la salud y la seguridad en el trabajo como un derecho fundamental de los trabajadores.

“Está claro que para garantizar la salud y la seguridad en el trabajo y la eliminación del trabajo infantil, todos los trabajadores y las trabajadoras de las fábricas de alimentos deben poder disfrutar de su derecho a la libertad sindical.

“Solo los sindicatos independientes y democráticos de trabajadores y trabajadoras pueden hacer cumplir el derecho a un lugar de trabajo seguro que no utilice mano de obra infantil. Los sindicatos consiguen que el trabajo sea más seguro”, concluye Sharan Burrow.