Eswatini: la CSI reacciona ante la brutal represión de una manifestación sindical

Más de 30 personas han resultado heridas después de que la policía abriera fuego contra manifestantes durante una huelga de los trabajadores del sector público en Eswatini. La Confederación Sindical Internacional (CSI) ha condenado la brutalidad que ejerció el gobierno contra los manifestantes pacíficos.

“Respetar los derechos de los trabajadores, dialogar de buena fe y un gobierno que responda a las necesidades e inquietudes de su pueblo, como en cualquier otro país: eso es lo que necesita Eswatini. No ejercer la violencia estatal contra sus ciudadanos. A principios de este año, el rey Mswati de Eswatini nos prometió que tendería puentes, pero ahora vemos cómo el gobierno está empleando todos los medios a su alcance para socavarlos”, declaró Sharan Burrow, Secretaria General de la CSI.

Con el fin de reprimir la huelga, el gobierno recurrió al Tribunal Nacional de Relaciones Laborales para ilegalizarla. En una carta dirigida al Primer Ministro Ambrose Mandvulo, la CSI hizo hincapié en los compromisos adquiridos en el pasado para establecer un diálogo y le recordó que “el uso de la violencia, incluso por presuntos motivos de seguridad interna, constituye una violación grave de los derechos humanos y sindicales”.

El Secretario General del sindicato National Public Service and Allied Workers Union (NAPSAWU), al que dispararon con balas reales, fue uno de los heridos. Dicha violencia se enmarca en un contexto más amplio de recortes de las libertades democráticas en el país. El Consejo de Derechos Humanos de las Naciones Unidas ha instado al gobierno de Eswatini a que establezca medidas para la protección de las manifestaciones y los actos públicos.

“El gobierno ha alegado que la huelga representaba una amenaza para el interés nacional. Si el hecho de que el pueblo swazi demande unas condiciones laborales dignas va contra el concepto del gobierno de lo que es “interés nacional”, entonces ese gobierno no ha entendido nada”, concluyó Sharan Burrow.

Más información:

Carta al Primer Ministro Ambrose Mandvulo