Qatar no consigue detener una investigación de la OIT sobre el trabajo forzoso

El Gobierno de Qatar ha fracasado en su intento de cerrar una investigación sobre el sistema de trabajo forzoso en el país, que la Organización Internacional del Trabajo de la ONU está llevando a cabo en el marco de una decisión clave del Consejo de Administración de la OIT esta semana.

Los representantes de los trabajadores y de los empleadores participaron junto con los delegados del Gobierno en una votación sobre la decisión de enviar una misión tripartita de alto nivel a Qatar, que resultó en 35 votos a favor, 13 en contra y 7 abstenciones, lo que permite intensificar la presión que se está ejerciendo en el país para que se erradique el sistema de esclavitud moderna.

Sharan Burrow, Secretaria General de la CSI, ha expresado: “La clara postura de la OIT en contra de la esclavitud moderna da esperanza a los 1,8 millones de trabajadores y trabajadoras migrantes atrapados en el sistema de kafala de Qatar, conforme al cual se les deniega la libertad de marcharse de Qatar, de cambiar de empleo o de crear un sindicato para negociar unas condiciones de trabajo y unos salarios dignos.

El Gobierno de Qatar tiene que introducir reformas fundamentales y urgentes a su legislación laboral para frenar las sobrecogedoras cifras de muertos y lesionados que se están registrando, así como la explotación de la mano de obra, conforme va aumentando la presión para cumplir los plazos de las obras de infraestructura para la Copa del Mundo 2022”.

El envío de una misión de la OIT a Qatar es un paso importante en el proceso de decisión relativo al establecimiento de una Comisión de Encuesta oficial de la OIT sobre el trabajo forzoso en Qatar, punto que se incluirá en el orden del día de la reunión del Consejo de Administración prevista para marzo de 2016.

“Los cambios a la legislación laboral que Qatar ha anunciado recientemente dejan el sistema de kafala intacto, agregando nuevas capas de burocracia y haciendo que a los trabajadores les resulte más difícil todavía poder marcharse de Qatar o cambiar de trabajo. Estos cambios permiten asimismo a los empleadores “prestar” trabajadores a otros empleadores, en contra de la voluntad de los trabajadores. Lo más preocupante de todo es que el número de víctimas mortales entre los trabajadores migrantes sigue aumentando mientras las autoridades del país se dedican a jugar a las relaciones públicas para eludir la presión internacional para que el Gobierno lleve a cabo las reformas”, indica Burrow.

Con 1,8 millones de trabajadores migrantes actualmente en Qatar, las estadísticas del Consejo Supremo de Salud de Qatar anticipan que, con base en la población de trabajadores migrantes de este año, el número de víctimas mortales ascenderá a 1.090 trabajadores migrantes. Teniendo en cuenta que el número de trabajadores que están llegando al país todavía no ha alcanzado su máximo, se calcula que aproximadamente 7.000 trabajadores morirán en Qatar antes del comienzo de la Copa del Mundo 2022 a menos que la legislación laboral del país se ajuste a las normas internacionales de la OIT.

“A Qatar, uno de los países más ricos del mundo, le resultaría muy fácil llevar a cabo estas reformas. La libertad de movimiento y la libertad sindical para los trabajadores migrantes, un salario mínimo independientemente de la raza del trabajador, y un sistema de cumplimiento que funcione realmente, son factores que transformarían las vidas de cientos de miles de trabajadores y sus familias en sus países en sus países origen. Lo único que falta es voluntad política”, concluye Burrow.

Conocer la realidad en la que viven los trabajadores migrantes de Qatar