Suazilandia intensifica la intimidación policial contra los trabajadores

La CSI ha condenado el último acto de represión antisindical del régimen suazi del rey Mswati, ocurrido la semana pasada.

La confederación sindical TUCOSWA había convocado a sus miembros el 26 de febrero para celebrar una asamblea multitudinaria en la que abordar temas candentes, como el registro de los sindicatos, la pérdida de las ventajas comerciales que disfrutaba el país a raíz de la entrada en vigor de la Ley de Crecimiento y Oportunidades para África, los derechos a la negociación colectiva y la falta de pluralidad democrática.

La policía utilizó numerosas tácticas para intimidar a los trabajadores e impedir la asamblea. El propietario del Centro de Formación Bosco en Mancini, donde estaba previsto celebrar la asamblea, fue informado falsamente que alquilar su centro a TUCOSWA contravenía la legislación suazi.

Cuando se decidió trasladar la reunión al Centro de la Asociación Nacional de Maestros de Suazilandia, la policía montó varios controles de carretera en el país y situó a policías uniformados y de paisano frente al centro. A pesar de la presencia policial intimidatoria y de los bloqueos de carretera, más de 100 trabajadores accedieron al centro SNAT; pero la policía, a las órdenes del Comisario Regional Richard Mngometulu y la Responsable de Operaciones, Josefa Bhembe, impidió que se celebrara el encuentro.

Sharan Burrow, Secretaria General de la CSI, ha declarado: “No cabe duda de que estamos ante una grave violación de las leyes suazi e internacionales que garantizan el derecho de los trabajadores a reunirse para analizar las cuestiones socioeconómicas que afectan a sus vidas. La violación de estos derechos fundamentales se ha convertido en un problema sistémico en Suazilandia. El gobierno debe proceder a una investigación sin más demora, obligar a los jefes de policía responsables a que rindan cuentas y reformar estas arcaicas leyes y prácticas antisindicales”.