Bruselas, 6 de noviembre de 2007: La CSI se sumó a la PWF, su afiliada paquistaní, para reclamar el inmediato restablecimiento del imperio de la ley, la constitución del país y los derechos democráticos fundamentales de su población. Dentro del marco del estado de sitio impuesto por el General Pervez Musharraf, quien encabeza el gobierno militar de Pakistán, se suspendieron los derechos fundamentales, inclusive la libertad sindical y de reunión, se impusieron graves limitaciones a los medios informativos, fueron detenidos miembros de la oposición y el gobierno está ejerciendo más presión sobre los abogados y el poder judicial.

"Se debe volver a restablecer la Constitución, el imperio de la ley e instaurar adecuados procesos democráticos”, dijo Guy Ryder, Secretario General de la CSI. “Las acciones del General Musharraf constituyen un enorme retroceso para todo el país. No podrá tener éxito ningún intento de combatir las tensiones existentes en Pakistán a menos que éste se base en que el pueblo de Pakistán pueda hacer pleno ejercicio de los derechos democráticos ".

Las restricciones que se están imponiendo sobre la celebración de reuniones y manifestaciones tendrán una repercusión especialmente grande en la fuerza laboral paquistaní, ya que sus sindicatos no podrán funcionar libremente ni representar como es debido a los trabajadores y trabajadoras o defender sus derechos. La CSI le pide a las autoridades que respeten las obligaciones internacionales de Pakistán, especialmente en lo concerniente a la libertad sindical, y que tomen medidas inmediatas para poner término al estado de sitio y para permitir que se celebren las elecciones programadas para enero de 2008 con total libertad y equidad.

La CSI representa a 168 millones de trabajadores de 153 países y territorios y cuenta con 305 afiliadas nacionales.

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