Bruselas, 5 de junio de 2007: La CSI denuncia la agravación de la represión antisindical observada estas últimas horas en Chad, a raíz de una huelga del sector público convocada por la Intersindical, desde hace un mes. Desde el principio de la huelga, los trabajadores y trabajadoras que participan en el movimiento han sido blanco de presiones, pero estas últimas horas se han registrado actos de violencia. Esta mañana, las fuerzas de seguridad tomaron por asalto Djamena, la Bolsa de Trabajo, impidiendo que abriera sus puertas. La situación en torno a la Bolsa de Trabajo volvió a la normalidad, pero la sede del sindicato de docentes, Syndicat des Enseignants du Tchad, que forma parte de la Intersindical, sigue ocupada por las fuerzas policiales y la gendarmería, impidiendo el acceso de los trabajadores y trabajadoras. A estas circunstancias se añaden las medidas que impiden la participación del Sr. Djibrine Assali, Secretario General de UST (Union des syndicats du Tchad), en la Conferencia de la Organización Internacional del Trabajo. Efectivamente, su pasaporte fue confiscado el 27 de mayo pasado, cuando se disponía a tomar un vuelo para viajar a Ginebra.

Los pasados días 7 de mayo y 5 de junio, la CSI se dirigió al Presidente de la República de Chad para que se tomen medidas urgentes que den respuesta a las reivindicaciones de las organizaciones sindicales. Desde esa fecha, siguen siendo muy pocos los progresos realizados en las negociaciones. Los trabajadores/as pedían una revalorización del índice en la función pública, el aumento del salario mínimo, un aumento muy importante, adaptado al coste de la vida, de las pensiones de jubilación y los subsidios familiares. No obstante, en este país, rico en petróleo, los avances conseguidos son mínimos. El Gobierno insiste por el momento en un aumento del 15% de los salarios así como un pequeño aumento de los subsidios familiares.

La violencia antisindical no se limitó a Djamena. En Bongor, ciudad situada a 300 km de la capital Djamena, la guardia nómada disparó contra los alumnos y los trabajadores manifestantes. En Sarh y Gounou Gaya, otras dos ciudades situadas al sur de Chad, también se registraron disparos de la policía sobre los manifestantes. Ya se lamentan varios heridos.

Mientras que las manifestaciones de solidaridad de las organizaciones sindicales se hacen oír en el mundo entero, la CSI reiteró su llamamiento a las fuerzas del orden y al Gobierno chadiano para que cese la violencia, se respeten debidamente los derechos sindicales y se aporten sin tardanza respuestas a las reivindicaciones de los trabajadores y las trabajadoras en huelga.

Creada el 1 de noviembre de 2006, la CSI representa a 168 millones de trabajadoras y trabajadores a través de 304 organizaciones nacionales en 153 países y territorios.

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