Guinea: La Conferencia Sindical Internacional para la Promoción del Desarrollo Sostenible permite que un país que ha sido muy duramente golpeado pueda abrigar esperanzas

Los días 23 y 24 de mayo, las principales centrales sindicales de Guinea llevan a cabo en Conakry, la capital del país, una gran Conferencia Sindical Internacional (...)

Bruselas, 23 de mayo de 2007: Los días 23 y 24 de mayo, las principales centrales sindicales de Guinea -CNTG, USTG y ONSGL-, respaldadas por la CSI y las organizaciones regionales ODSTA y ORAF, llevan a cabo en Conakry, la capital del país, una gran Conferencia Sindical Internacional para la Promoción del Desarrollo Sostenible. Esta conferencia girará en torno a tres temas principales: el desarrollo económico y social, la gobernanza y las instituciones y los derechos humanos.

La Conferencia Sindical Internacional para la Promoción del Desarrollo Sostenible culminaría con la adopción de un mapa de ruta que permitiría sacar a relucir las reivindicaciones del movimiento sindical internacional y de la sociedad civil guineana en el largo camino hacia la consolidación de la paz, la democracia y el desarrollo de Guinea.

Durante el primer semestre del año 2007 hubo numerosos sucesos y una impresionante movilización de los trabajadores guineanos. El 2 de enero, la Intercentral (CNTG y USTG) -ampliada con la ONSLG y la UDTG- lanzó una convocatoria de huelga general por tiempo indeterminado a raíz de que Lansana Conté, Presidente de la República, hubiera liberado a dos representantes del sector privado acusados de graves malversaciones de fondos. La falta de respeto de los acuerdos firmados entre el gobierno y los sindicatos en 2006 fue otro de los factores desencadenantes, además de que las condiciones de vida continuaron deteriorándose sin cesar desde entonces y que no hubo voluntad política para mejorar la situación.

Si bien hubo una gran adhesión a la huelga, la represión, a menudo violentísima, no se hizo esperar y fue acompañada de presiones sobre los dirigentes sindicales Rabiatou Diallo de la CNTG, Ibrahim Fofana de la USTG y Yamadou Toure de la ONSLG para que suspendieran el paro de actividades. El 27 de enero, el Presidente de la República aceptó reunirse con los sindicatos y entablar negociaciones. Éstas desembocaron en un protocolo de Acuerdo estipulando la instauración de un gobierno que gozara de amplio consenso, la separación de poderes, una protección de los derechos humanos y reivindicaciones de orden socioeconómico.

El 9 de febrero se reanudó la huelga general, a raíz de que para el cargo de Primer Ministro se hubiera designado a la persona que había sido la mano derecha del Presidente Conté. Una vez reanudada la huelga tuvo lugar una nueva oleada de represión, a la que se le sumó que se declaró el estado de sitio. Entre enero y febrero fueron asesinadas más de 129 personas y hubo 1.700 heridos. Se pudo apaciguar la situación con la designación de Lansana Kouyate, un Primer Ministro propuesto por las organizaciones sindicales que goza de amplio consenso. El nuevo Primer Ministro se enfrenta con enormes problemas: conseguir que se respeten los derechos humanos, aclarar sucesos violentos, restablecer las instituciones democráticas…

“La Conferencia para la Reconstrucción y la Reconciliación Nacionales hace que los guineanos abriguen verdaderas esperanzas para las elecciones de finales de 2007”, señaló Guy Ryder, Secretario General de la CSI. “Si bien ahora hay en Guinea un período de transición, todavía queda muchísimo por hacer hasta llegar a mejorar la situación social. El desafío de la consolidación de la democracia está a la altura de las esperanzas”, agregó.

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