Protestas sociales ante el recorte de la AOD en España

La Alianza Española contra la Pobreza, coalición de diferentes ONG al desarrollo, sociales, iglesias y a la que pertenecen los sindicatos españoles (CCOO, UGT y USO) “rechaza los Presupuestos Generales del Estado por ser injustos, desproporcionados e insolidarios. La aprobación de estos PGE supondría una ruptura del consenso social y político expresado en el Pacto de Estado contra la Pobreza, firmado por todas las fuerzas políticas en 2007 y que establecía que en 2012 se cumpliría el objetivo del 0,7% de la RNB para AOD, y el objetivo que se asume en el ‘Programa Nacional de Reforma’ que compromete a España a disminuir el riesgo de pobreza y exclusión”.

Por su parte la Coordinadora de ONGs de cooperación al desarrollo, donde también están las organizaciones de este sector promovidas por los sindicatos, ha manifestado sobre este recorte de la AOD que “No se trata de contraponer unas personas con otras, sino de garantizar los servicios sociales básicos y los Derechos Humanos de las personas, independientemente del lugar en el que hayan nacido o vivan. La crisis que estamos viviendo es global, como también lo son sus consecuencias; lo que ocurre en un lugar repercute en el resto del planeta. Es precisamente por esta razón que, ahora más que nunca, debemos dar prioridad al mantenimiento de políticas públicas que garanticen las pensiones, la educación, la sanidad, el empleo, etc., tanto en España como fuera de nuestro país.

Garantizar esas políticas públicas es posible. Los fondos para tales fines pueden obtenerse equilibrando partidas como las destinadas a gastos militares o la inversión en el rescate a entidades financieras. Opciones existen y son reales. Lo que no podemos hacer, en ningún caso, es optar entre unas personas u otras y, por tanto, enfrentar a quienes sufren de manera más directa las consecuencias de la crisis sin que, paradójicamente, la hayan generado. Como ONG de Desarrollo, comprometidas con la justicia social y con amplia trayectoria en este sentido, creemos que hacerlo significaría olvidar nuestra responsabilidad ética y política ante los crecientes niveles de pobreza y de desigualdad que afectan a nuestra sociedad y al mundo.”

Artículo proporcionado por USO-SOTERMUN.