Se necesitan US$ 8.000 millones más para combatir el VIH-SIDA, los sindicatos piden más acción en el lugar de trabajo

El movimiento sindical ha transmitido esta semana a una reunión clave de la agencia de las Naciones Unidas ONUSIDA que, además de los compromisos reales por parte de los Gobiernos para cubrir los US$ 8.000 millones que aún se necesitan, es necesario sacar partido del impacto potencial que tienen las actividades en el lugar de trabajo a la hora de combatir la pandemia del VIH-SIDA.

“Sindicatos y empleadores comparten su determinación en apoyar acciones destinadas a poner fin a la propagación de la pandemia del SIDA, sin embargo sigue sin aprovecharse todo el potencial de una prevención y educación en el lugar de trabajo. Las Naciones Unidas han confirmado una vez más el papel crucial del mundo del trabajo, y es necesario que los Gobiernos y las agencias donantes brinden el apoyo necesario a acciones en el lugar de trabajo”, afirmó la Secretaria General de la CSI, Sharan Burrow.

Una reunión de alto nivel de la ONU celebrada en Nueva York a principios de junio se comprometió a “mitigar los efectos de la epidemia en los trabajadores y sus familias y familiares a cargo, los lugares de trabajo y las economías, incluso teniendo en cuenta todos los convenios pertinentes de la OIT y las directrices que emanan de sus recomendaciones, incluida la recomendación núm. 200” y exhortó “a los empleadores, los gremios y sindicatos, los empleados y los voluntarios a que eliminen el estigma y la discriminación, protejan los derechos humanos y faciliten el acceso a la prevención, el tratamiento, la atención y el apoyo en materia de VIH”.

Los sindicatos han pedido que la reunión en Ginebra del Consejo de Coordinación del Programa ONUSIDA se sume al llamamiento de la ONU con objeto de garantizar que las actividades relacionadas con el lugar de trabajo formen parte integral de la respuesta global sobre el VIH-SIDA. Un plan de acción de seis puntos, base de la acción de la CSI y sus asociados en la Agrupación Global Unions respecto al VIH-SIDA, destaca la importancia de:

• reducir el estigma y la discriminación en base al estado serológico real o supuesto respecto del VIH en la contratación y el empleo – como parte de la estrategia “llegar a cero discriminación”;

• incrementar el acceso a los programas de prevención a través de la prestación de servicios específicos sobre el VIH en el lugar de trabajo, en especial la educación de los compañeros de trabajo – como parte de la estrategia “llegar a cero nuevas infecciones”;

• apoyar a los países para que puedan responder al VIH/SIDA mediante planes y actuaciones más ambiciosos en relación con los Objetivos de Desarrollo del Milenio (ODM), estrategias para la erradicación de la pobreza y el desarrollo, en especial impulsar las políticas nacionales en materia de VIH en el lugar de trabajo, tal como se señala en la Recomendación No. 200 de la OIT sobre el VIH-SIDA;

• intensificar las estrategias relativas a la protección social y el acceso al tratamiento, atención y apoyo a través de la prestación de servicios específicos sobre el VIH/SIDA en el lugar de trabajo, incluyendo el acceso a tratamientos contra la transmisión del virus de la madre al hijo – como parte de la estrategia “llegar a cero muertes relacionadas con el SIDA”;

• que la ONU efectúe continuas revisiones respecto al VIH y asegurarse de que el VIH y las cuestiones relacionadas con los derechos humanos se mantengan como prioridades en el marco más amplio de la salud, incluyendo la adopción y ratificación de un conjunto de indicadores sobre derechos humanos para la supervisión, rendición de cuentas y elaboración de presupuestos a nivel nacional.

“Más de 34 millones de personas viven actualmente con el VIH. Estamos muy lejos de eliminar la pandemia, ni tan siquiera de alcanzar otros desafíos mundiales respecto a la salud. Los sindicatos están haciendo muchísimo respecto al VIH-SIDA, en el lugar de trabajo y en la sociedad, y un mayor apoyo por parte de los Gobiernos conseguiría que este trabajo tenga un impacto aún mayor”, comentó Burrow.