En su respuesta a la adopción del instrumento, las confederaciones sindicales señalan la inclusión de muchas de sus peticiones clave en el texto final: los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) figuran entre los objetivos clave del IVDCI, mientras que el trabajo decente, las normas de la OIT y la diligencia debida se incluyen en las prioridades de cooperación al desarrollo del instrumento. El IVDCI incorpora mecanismos de evaluación de impacto más inclusivos y transparentes que instrumentos anteriores.

Sin embargo, la CSI y la CES han dado la voz de alarma sobre los recortes presupuestarios globales del Instrumento y expresan su profunda preocupación por la inclusión de una condicionalidad migratoria en el texto pese a las reiteradas demandas de los sindicatos de que la asignación de la ayuda al desarrollo no se condicione a la cooperación en la gestión de la migración.

A través de sus organizaciones afiliadas a escala local, regional y nacional, los sindicatos se comprometen a supervisar la aplicación del IVDCI-Una Europa global para asegurarse de que los compromisos de la UE en materia de cooperación al desarrollo no se diluyan en unos objetivos más amplios de las relaciones exteriores de la UE.

La solidaridad debe ocupar un lugar central en la aplicación del IVDCI-Una Europa global, contando con los interlocutores sociales como aliados clave para pasar del compromiso a la acción.