Panamá: dos sindicalistas asesinados en el sector de la construcción.

2 sindicalistas fueron asesinados en Panamá por oponerse a los despidos masivos y a la obligación de afiliarse al sindicato “amarillo” (...)

Bruselas, 27 de agosto de 2007: 2 sindicalistas fueron asesinados en Panamá por oponerse a los despidos masivos y a la obligación de afiliarse al sindicato “amarillo” de la Industria de la Construcción y Perforación SINDICOPP, controlado por la Empresa Norberto Odebrecht. La CSI, que cuenta con tres organizaciones afiliadas en Panamá, la Confederación de Trabajadores de la República de Panamá (CTRP), la Confederación General de Trabajadores de Panamá (CGTP) y Convergencia Sindical (CS), ha denunciado y condenado vigorosamente estos asesinatos.

Osvaldo Lorenzo Pérez, dirigente del Sindicato Único Nacional de Trabajadores de la Industria de la Construcción y Similares SUNTRACS fue asesinado a balazos por un trabajador contratado por la empresa brasileña Norberto Odebrecht para reprimir las demandas de los trabajadores injustamente despedidos cuando él y un grupo de trabajadores exigían el reintegro de cien trabajadores despedidos. En marzo del 2007, SUNTRACS había lanzado una gran campaña para denunciar la violación de las normas de seguridad laboral a fin de frenar la ola de muertes en la construcción y el deterioro de las condiciones de trabajo en este sector.

Luigi Antonio Argüeles, otro representante sindical de SUNTRACS, fue asesinado el 16 de agosto por un disparo de un agente de la Policía Nacional. Argüeles hacía parte de un grupo de trabajadores que se dirigía a la empresa MAQTEC SA a presentar una resolución formal emitida por la Alcaldía de Balbo por no cumplir con disposiciones municipales y a exigir los salarios adeudados por la empresa.

En una carta a las autoridades de Panamá, la CSI se suma a sus organizaciones regionales ORIT Y CLAT a fin de expresar su enérgica condena por estos asesinatos que enlutan a todo el movimiento sindical e instar al gobierno de Panamá a que se lleve a cabo una investigación exhaustiva de cada uno de los asesinatos, que se detenga a los culpables intelectuales y materiales, que sean juzgados por un tribunal competente, justo e imparcial y se apliquen las sanciones previstas por la ley.

También la CSI solicita al gobierno de Panamá a fin de que se respeten los derechos fundamentales de los trabajadores/as, consagrados en la Constitución Política de la República, el Código de Trabajo y en los Convenios de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), en particular los Convenios 87 sobre la libertad sindical y 98 sobre el derecho de sindicación y negociación colectiva ratificados por su país y por ende legalmente vinculantes.


La CSI, fundada el 1 de noviembre de 2006, representa a 168 millones de trabajadores de 153 países y territorios y cuenta con 304 afiliadas nacionales.

Para mayor información, favor de ponerse en contacto con la Oficina de Prensa de la CSI a los teléfonos: +32 2 224 0204 ó +32 476 621 018.