Los sindicatos obtienen un incremento del salario mínimo en Nigeria

La CSI se congratula de los progresos logrados para obtener un incremento del salario mínimo de un 66% en Nigeria. Los sindicatos consiguieron reunir apoyos para esta mejora, en medio de intentos de última hora para diluir los términos del incremento negociado conjuntamente.

“Esta es una gran noticia y, tratándose del país más poblado de África, puede ser fuente de inspiración para toda la región y el resto del mundo. Los trabajadores se movilizaron, a través de sus sindicatos, para evitar que se debilitase el acuerdo alcanzado con el Gobierno y la patronal”, comentó la Secretaria General de la CSI, Sharan Burrow.

El nuevo salario mínimo nacional en Nigeria aumentará hasta 30.000 NGN (unos 87 USD) al mes. Aunque cubre a la mayoría de los trabajadores y trabajadoras, los sindicatos se oponen a una serie de cláusulas que excluirían a los empleados en pequeñas empresas. El acuerdo se consiguió inicialmente a través de negociaciones entre representantes de los trabajadores, los empleadores y el Gobierno. Sin embargo, poco después el Gobierno amenazó con minar las negociaciones reduciendo unilateralmente el monto negociado a 27.000 NGN.

La respuesta del movimiento sindical nigeriano fue la movilización de los trabajadores en protestas a nivel estatal, amenazando con convocar una huelga general. Finalmente, gracias a las presiones sindicales se logró reunir apoyos en la Cámara de Representantes a favor del monto negociado inicialmente, que ahora sólo necesita obtener la ratificación del Senado.

“En esta batalla por un nuevo salario mínimo nacional, todos salimos ganando y nadie ha perdido”, indicó Ayuba Wabba, Presidente de la CSI y del Nigeria Labour Congress, la mayor central sindical del país.

“Este incremento tendrá un impacto inmediato en el reparto de beneficios de la economía nigeriana en expansión, en última instancia porque el dinero revertirá en las comunidades locales, produciendo un efecto positivo que resonará en toda la sociedad y servirá de estímulo a la economía”, indicó la Sra. Burrow.

Los salarios mínimos tienen una función clave en la prosperidad compartida. Aumentando el poder adquisitivo, tienen un importante efecto multiplicador a escala local, algo que no queda reflejado en indicadores económicos como el PIB. Además, cuando se obtienen a través de negociaciones tripartitas, está demostrado que contribuyen a crear consenso social y refuerzan la estabilidad institucional, componentes esenciales del desarrollo sostenible.

“Este acuerdo representa un paso importante en la buena dirección, y felicitamos a nuestros compañeros y compañeras de Nigeria por el resultado final. Alentamos a otros países donde el salario mínimo resulte insuficiente a seguir este ejemplo, negociando un salario mínimo vital con los sindicatos”, concluyó Sharan Burrow.