¡Los sindicatos en Burundi ponen la transición justa para el cambio climático a la cabeza de la agenda!

Las personas trabajadoras del Sur se están preparando para adaptar su forma de vida y de trabajo a las nuevas condiciones derivadas del cambio climático. La organización de apoyo solidario MIS y la CGSLB de Bélgica han trabajado junto con COSYBU y CSB de Burundi para comenzar a dar forma a este proceso.

Por Joris Verschueren, Departamento Internacional de la CGSLB

El ciclón Dorian, las inundaciones en el sudeste de Asia e incluso la epidemia de malaria en Burundi provocada por el aumento de las temperaturas nos recuerdan con crudeza que el calentamiento global golpea cada vez más al Sur Global.
No es de extrañar que mientras el movimiento sindical mundial se prepara para una transición justa, los sindicatos del Sur parecen estar más conscientes de los efectos devastadores que el cambio climático tiene sobre los medios de vida de los trabajadores. Sus planes de acción reflejan un cambio de enfoque pasando de los temas tradicionales como la salud y la seguridad en el lugar de trabajo hacia una preocupación más amplia sobre entender, prevenir y mitigar los efectos del cambio climático sobre las condiciones de trabajo, el empleo, los ingresos (pérdidas) y la dependencia de los trabajadores de su entorno natural.

En octubre de 2018, con la ayuda del CGSLB Bélgica y la organización de apoyo solidario MIS, los dos sindicatos de Burundi COSYBU y CSB decidieron esbozar una estrategia ambiental conjunta, en el marco del programa de asociación 2017-2021. La estrategia se adoptó a principios de 2019.

Burundi es una sociedad muy rural, con el 90% de la fuerza laboral ubicada en la economía informal. La abrumadora mayoría depende inequívocamente de los servicios del ecosistema - piense no solo en los agricultores, sino también en la fabricación de ladrillos y otros oficios de la construcción, carpintería, quema de carbón, procesamiento de alimentos etc.

La singularidad de esta estrategia radica no solo en el hecho de que fue una cooperación entre sindicatos desde el principio, sino también en la amplitud de sus contenidos. Integra políticas ya existentes sobre salud y seguridad, más específicamente sobre contaminantes, establece una serie de actividades de sensibilización y cabildeo, y proporciona medidas de capacitación para los miembros. La estrategia integra igualmente elementos de la reciente Recomendación de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) sobre el trabajo decente para la paz y la resiliencia (R205, 2017).

Además, tanto COSYBU como CSB tienen la intención de actualizar sus estatutos en su próximo congreso, a fin de obligarse explícitamente a enfrentar los desafíos ambientales y ampliar su acción en este campo. Específicamente, los sindicatos resolvieron usar su posición en sus órganos de gobierno para buscar formas de abrir el sistema de protección social (aunque frágil) de Burundi a quienes sufren pérdidas de ingresos como resultado del cambio climático o la adaptación al mismo. Si bien esto está en línea con las posiciones de la OIT y la Confederación Sindical Internacional, sirve para demostrar que los sindicatos en Burundi se están preparando para un futuro en el que el cambio climático alterará cada vez más el mundo en el que vivimos y trabajamos.