La industria electrónica mundial cuestionada por el uso de sustancias tóxicas

Militantes de más de 200 organizaciones de todo el mundo han desafiado a la industria electrónica para que responda por los daños causados debido al uso de sustancias químicas tóxicas.

Militantes de más de 200 organizaciones de todo el mundo han desafiado a la industria electrónica para que responda por los daños causados debido al uso de sustancias químicas tóxicas.

El llamamiento se produjo el 16 de marzo de 2015, coincidiendo con la reunión de la Electronic Industry Citizenship Coalition (EICC) en Bruselas. EICC, una asociación de la industria electrónica que representa a más de 100 compañías del sector, se disponía a discutir sobre estrategias de gestión de los productos químicos.

Un ‘desafío’ a la EICC de parte de una coalición coordinada por los grupos de campaña la Red GoodElectronics y la Campaña internacional por una tecnología responsable (International Campaign for Responsible Technology, ICRT) exhorta a la industria a mejorar la gestión de productos químicos durante el proceso de producción. Indican que los trabajadores de la electrónica continúan sufriendo como resultado de su exposición a sustancias químicas peligrosas.

El desafío enfatiza la importancia de la transparencia, la sustitución de productos peligrosos con alternativas más seguras, la protección de los trabajadores, la libertad sindical, la participación de los trabajadores en el control de los lugares de trabajo, la protección del medio ambiente, y la necesidad de compensar y remediar el daño ocasionado a los trabajadores, las comunidades y el medio ambiente.

“Resulta increíble que las compañías técnicamente más avanzadas del mundo, cuyos nombres figuran en nuestros aparatos electrónicos, digan que siguen sin conocer todos los materiales que se utilizan en sus propios productos o en las fábricas de su cadena de suministro”, indicó Ted Smith, de la ICRT. “Lo que necesitamos de esta importante industria es que garantice empleos seguros y familias sanas, que la próxima generación de nuestros hijos sea al menos tan importante para ellos como la próxima generación de chips”.

Pauline Overeem, coordinadora de la Red GoodElectronics, se mostró crítica hacia los sistemas de auditoría de la industria. “Estas auditorías corporativas no revelan los niveles de exposición a sustancias químicas ni otras violaciones de los derechos laborales a lo largo de la cadena de suministro”, indicó. “Hay una evidente desconexión entre los informes de auditoría y la dura realidad en muchas fábricas. Es por ello que desafiamos a la industria para que cambien su comportamiento cuanto antes”.