El llamamiento se produce después de que cientos de trabajadores del petróleo fuesen detenidos el 11 de abril por manifestarse en la capital, Astana, para poner de relieve el trato injusto, explotador e indecente de que eran víctimas.
La protesta se declaró en respuesta al despido de unos 250 trabajadores del petróleo en la localidad de Zhanaozen por la compañía Ali Ber, tras haber perdido un contrato con Kazmunaigaz, la empresa estatal del petróleo y el gas. En 2011, 17 personas perdieron la vida y cientos más resultaron heridas cuando las fuerzas de seguridad pusieron término brutalmente a una protesta pacífica de miles de trabajadores/as durante varios meses, reclamando mejores salarios y condiciones de trabajo.
Diálogo social significativo
La presidenta de la CSI, Akiko Gono, declaró: “Esto es fiel reflejo de la manera corrupta en que funciona la industria del petróleo y el gas en Kazajistán, siempre a expensas de la gente trabajadora. Kazmunaigaz va moviendo contratos entre diferentes empresas operadoras para socavar las condiciones de trabajo. Estas empresas despiden personal cuando pierden un contrato y la nueva empresa que lo consigue recontrata a parte, pero no a la totalidad y generalmente con peores condiciones.
“Esto tiene que acabar. Existen soluciones para gestionar la situación de forma mucho más justa y dando voz a la gente trabajadora. Con ello se mejorarían las condiciones en el sector aumentando la productividad. El diálogo social y la negociación colectiva son la mejor manera de conseguir transparencia, estabilidad y sostenibilidad, pero no resulta posible cuando la libertad sindical está restringida en la ley y en la práctica.
“Reclamamos la plena implementación de las recomendaciones de la OIT en relación con Kazajistán, incluyendo la libertad sindical y el registro del Sindicato de Trabajadores de la Industria del Combustible y la Energía. Esto conduciría al diálogo social y una negociación significativa, que constituye la piedra angular para combatir la corrupción en el sector y garantizar trabajo decente.
“Además, deben retirarse todos los cargos que pesan sobre los trabajadores involucrados en las protestas esta semana. Con las reformas que reclamamos, dispondrían de un canal para expresar sus reivindicaciones y podría evitarse una próxima crisis.
En reuniones con la Comisión de Aplicación de Normas de la OIT, con distintos representantes de la OIT y con la misión de la OIT enviada al país, el Gobierno de Kazajistán prometió que aplicaría dichas recomendaciones. No obstante, se ha limitado a introducir modestas reformas en la legislación laboral para mejorar la solución de disputas y simplificar las demandas en caso de conflicto laboral. Pero debe ir más lejos y promover una genuina negociación colectiva. Todavía tiene que garantizar la plena libertad de asociación en la ley, enmendando la ley de sindicatos, y en la práctica, facilitando en lugar de obstruir el registro de sindicatos. Esto debería incluir el reconocimiento de la Confederación de Sindicatos Independientes de Kazajistán, afiliada a la CSI, así como del Sindicato de Trabajadores de la Industria del Combustible y la Energía.