Las Naciones Unidas adoptaron en 2000 los Objetivos de Desarrollo del Milenio para reducir a la mitad la pobreza extrema para 2015. Para evaluar su impacto, ATD Cuarto Mundo evaluó los ODM con las poblaciones que viven en la pobreza extrema en 12 países: Bélgica, Bolivia, Brasil, Burkina Faso, Francia, Guatemala, Haití, Madagascar, Mauricio, Perú, Filipinas y Polonia. Los resultados de esta investigación-acción participativa de dos años se presentan en un informe publicado a principios de septiembre de 2014, “Desafío 2015: Hacia un Desarrollo Sostenible que no deje a nadie atrás”, que se puede descargar en español del sitio
Este informe muestra que el recurso a estadísticas mundiales ha creado la ilusión de que se han alcanzado en parte los ODM, mientras que han dejado de lado a las poblaciones más desfavorecidas. Además, muestra que los programas de desarrollo, elaborados sin la participación de las poblaciones más marginadas se vuelven en su contra. “Incluso en la pobreza extrema, una persona tiene ideas. Si no se reconocen estas ideas, la gente cae aún más en la pobreza”, decía un participante de Burkina Faso. Ocho seminarios internacionales permitieron reunir a numerosos socios para elaborar cinco recomendaciones comunes para después de 2015. La Confederación Sindical Internacional participó en varios de los seminarios y se publicó una declaración común en el informe.
Cinco recomendaciones para la agenda de desarrollo post-2015:
1. No dejar a nadie atrás. Eliminar en todos los países la discriminación por motivos de género, origen social o pobreza.
2. Considerar a las personas que viven en la pobreza como nuevos socios en la construcción del conocimiento, incluso en la definición de los indicadores de pobreza.
3. Promover una economía que respete a las personas y el medio ambiente, incluyendo el trabajo decente para todos y el establecimiento de pisos de protección social en todos los países.
4. Conseguir que la educación y la formación lleguen a todos a través de la cooperación entre todos los actores, lo que significa una educación gratuita, de calidad y adaptada a las necesidades de toda la comunidad.
5. Promover la paz a través de una buena gobernanza participativa. Garantizar que las estructuras locales, nacionales e internacionales creen mecanismos participativos.
Vídeos con información adicional: OMD post 2015 Fr 8’ de ATDFRA en Vimeo y “A los que nadie escucha” http://unheard-voices.org/?lang=es
