Los ODS nos muestran cómo afrontar los problemas a los que se enfrenta el mundo y el nuevo contrato social que piden los sindicatos muestra cómo los trabajadores pueden realizar los cambios necesarios. Construirán ciudades con agua limpia, energía verde e infraestructura sostenible. Mantendrán las industrias del futuro.
Pero para hacer todo ello, en contrapartida, quieren que se respeten sus derechos y se asegure su seguridad e igualdad en el trabajo, que se les dé reconocimiento a través condiciones de trabajo decentes, salarios dignos, protección social y una voz en la toma de decisiones a través del diálogo social.
El tiempo se está agotando. Los Gobiernos deben actuar ahora, y hacerlo junto a los interlocutores sociales. Hay que acelerar la acción para lograr el ODS 8 y el resto de objetivos de la Agenda 2030.
PRIORIDADES SINDICALES PARA EL ODS 17
- Reforzar el papel del diálogo social como medio clave para la aplicación de la Agenda 2030 y en las estrategias para fomentar la recuperación y la resiliencia frente a la crisis de Covid-19: Para ser sostenibles, las medidas de respuesta a la crisis deben basarse en el compromiso de los interlocutores sociales. El diálogo social y las relaciones laborales ayudan a reconstruir la democracia y la confianza en las instituciones y contribuyen a elaborar políticas equitativas y sostenibles.
- Necesitamos un nuevo modelo de gobernanza mundial para corregir el actual desequilibrio de poder y la desigual distribución de la riqueza a nivel internacional: Un sistema multilateral verdaderamente inclusivo en el que los interlocutores sociales participen y tengan voz.
- Garantizar la aplicación de estrategias de financiación adecuadas que incluyan un aumento de la cantidad y la calidad de la Ayuda Oficial al Desarrollo (AOD); la reestructuración y la cancelación del alivio de la deuda; la aplicación de sistemas fiscales progresivos y una reforma multilateral de la actual arquitectura del impuesto de sociedades, incluido un mínimo fiscal del 25% para todas las empresas, un impuesto sobre la riqueza de los multimillonarios y un impuesto sobre las transacciones financieras; la lucha contra la evasión fiscal, la elusión fiscal y los flujos financieros ilícitos; la reasignación de los Derechos Especiales de Giro y la responsabilidad de las empresas.
- Mejorar la cantidad, calidad y accesibilidad de los datos para contribuir a una política nacional transparente e inclusiva y a los procesos de toma de decisiones.
- Aplicar estrategias de digitalización que promuevan las transiciones justas y el aprendizaje permanente, reduciendo al mínimo el control intrusivo, la vigilancia y el control algorítmico de los trabajadores.
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