Entrevista en primer plano a M. Sulistris (Indonesia-K-SBSI)

“Espero que la CSI reforzará la solidaridad internacional a favor de la mujer”

Sulistris es responsable del Departamento de la mujer en K-SBSI (1), una de las organizaciones indonesias afiliadas a la CSI. Esta sindicalista de 33 años nos hizo partícipes de las esperanzas que ha depositado en la fusión de las dos grandes internacionales sindicales. Nos explica además la lucha de los sindicalistas indonesios para defender mejor sus derechos así como los de los trabajadores y trabajadoras jóvenes.

¿Qué espera de la fundación de la nueva Confederación Sindical Internacional?

Espero que el futuro brinde un lugar más destacado a la mujer, con más posibilidades de negociar directamente en las empresas. Tanto en el ámbito internacional como en Indonesia, resulta muy positivo que los sindicatos se unifiquen, aún cuando ciertas cuestiones delicadas como diferencias de personalidad puedan en ocasiones constituir un obstáculo para ello. Haber sido miembros de la CMT nos ha servido muchas veces de ayuda debido a la posibilidad de intercambiar conocimientos, pero además el apoyo de la CMT en caso de encontrar algún problema importante en una fábrica indonesia (represión antisindical, por ejemplo). Confío en que esta unificación nos aporte aún más solidaridad en ese plano. Esperamos además obtener mayor información sobre lo que hacen las mujeres de otros países para que se las respete más tanto en los sindicatos como en el mundo del trabajo.

¿Cómo se incorporó usted al movimiento sindical?

Trabajo en una fábrica de confección. En 1992, un amigo me facilitó información sobre la existencia del movimiento sindical, y me convertí en miembro porque quería defender mejor mis derechos. Era un período muy difícil: bajo el régimen de Suharto, las empresas no estaban dispuestas a negociar colectivamente, había muchísima represión, el movimiento sindical no podía obtener entonces lo que puede obtener en la actualidad. Tres años más tarde, fui elegida Presidenta del sindicato de mi empresa, más tarde me incorporé a la federación y ahora al Departamento de la Mujer en la Confederación K-SBSI.

¿Qué actividades organiza la K-SBSI a favor de los jóvenes?

Exigimos, por ejemplo, que el gobierno incluya las relaciones profesionales en los cursos de secundaria, confiando en que así los jóvenes bachilleres desearán afiliarse a un sindicato al finalizar sus estudios. Llevamos a cabo además campañas para ayudar a nuestros miembros a tomar conciencia de las discriminaciones de que son víctimas los jóvenes y las mujeres en las empresas. Por ejemplo, aunque los salarios sean iguales, las mujeres muchas veces no cobran subsidios familiares.

Hace falta que la confederación modifique su estrategia para organizar a los trabajadores y trabajadoras jóvenes. Hemos preparado folletos y carteles para intentar convencer a los jóvenes de que se afilien, pero convendría llevar a cabo más actividades deportivas a fin de hacer llegar a la juventud otra imagen de los sindicatos.

¿Cuáles son las principales acciones del Comité de Mujeres de la K-SBSI?

K-SBSI cuenta con unos 400.000 miembros que pagan cotizaciones, de los que el 35% son mujeres. Nuestro objetivo es reforzar la capacidad de las mujeres para convertirse en líderes sindicales, y lo hacemos mediante cursos de formación. Se organizan igualmente seminarios para capacitar mejor a las mujeres sobre técnicas de negociación: en Indonesia, la gran mayoría de los negociadores son hombres, y tememos que el contenido de los convenios colectivos que negocian no tengan suficientemente en cuenta las necesidades específicas de las trabajadoras, por ejemplo en lo que respecta a los subsidios familiares o los permisos de maternidad. La confederación capacita formadores y formadoras que, a su vez, se encargarán de reproducir la capacitación recibida en las empresas. Alrededor del 15% de las mujeres de la K-SBSI han recibido este tipo de formación hasta el momento. Hemos elaborado material escrito para ayudar a los negociadores, tanto hombres como mujeres, para que puedan negociar mejor respecto a estos aspectos.

¿Nota que los hombres sindicalistas muestran cierta resistencia a su voluntad de lograr que se escuche la voz de las trabajadoras?

Al igual que en otros países, no siempre resulta fácil para las mujeres indonesias ascender en la jerarquía sindical, dado que algunos hombres tienen miedo de llegar a perder sus puestos. En ningún caso queremos luchar contra los hombres, preferimos hablar con ellos, sensibilizarlos respecto a las injusticias de que somos víctimas a fin de obtener su apoyo en nuestra lucha por la igualdad de género. En el marco institucional, en el seno de la K-SBSI, por el momento no tenemos sino un Departamento de la Mujer, aunque todavía no estamos representadas en el “presidium”, la instancia de dirección de la confederación. Nuestro objetivo es lograr cambiar esta situación después del próximo congreso.

¿Considera que la existencia de cupos resulta de utilidad para promover el lugar de la mujer en los sindicatos?

En el seno de la K-SBSI también hay un cupo reservado a las mujeres. Es algo que está muy bien, pero en algunas federaciones, como por ejemplo en el sector minero, comprendemos que no sería realista. Con todo, los cupos no resultan suficientes: es necesario además que las mujeres lleguen a ocupar cargos importantes en la jerarquía sindical, como por ejemplo puestos de tesorera, vicepresidenta...

Entrevista realizada por Samuel Grumiau



(1) Serikat Buruh Sejahtera Indonesia