En Colombia continúan las violaciones de las normas fundamentales del trabajo

En el día de la fecha se ha dado a conocer un nuevo informe (enlace hacia el informe) de la CSI sobre Colombia, coincidiendo con la revisión de la política comercial de ese país que la OMC lleva a cabo los días 22 y 24 de noviembre.

Bruselas, 22 de noviembre de 2006 (La CSI EnLínea): En el día de la fecha se ha dado a conocer un nuevo informe de la CSI sobre Colombia, coincidiendo con la revisión de la política comercial de ese país que la OMC lleva a cabo los días 22 y 24 de noviembre.

En dicho informe se señala que Colombia detenta el triste récord de ser el país donde fue asesinada la mayor cantidad de hombres y mujeres como consecuencia directa de su labor sindical. En 2005 fueron asesinados 70 sindicalistas. En 2006, hasta comienzos de noviembre, el saldo ya ascendía a 53 sindicalistas asesinados. Entre los demás actos de violencia que se perpetran contra los sindicalistas están los secuestros, intentos de asesinato, desapariciones, amenazas, detenciones, torturas y traslados forzosos. En el informe se señala además que durante los últimos cuatro años aumentó la cantidad de violaciones de los derechos humanos y sindicales de parte de los organismos estatales de seguridad. “La violencia sistemática y selectiva que se practica contra los sindicalistas con total impunidad sigue siendo el mayor obstáculo para que actualmente los trabajadores y trabajadoras gocen de sus derechos en Colombia”, dijo Guy Ryder, Secretario General de la CSI.

En el informe se pone de relieve que, en la práctica, pocos son los trabajadores de Colombia que gozan de sus derechos fundamentales de formar sindicatos o de afiliarse a los mismos, de efectuar negociaciones colectivas o de hacer huelga, a pesar de que dichos derechos están comprendidos en la Constitución de 1991 de Colombia. Los actos antisindicales ilegales generalmente quedan impunes al tiempo que las prácticas del gobierno en lo referente a reestructuración y privatización de empresas públicas solamente pueden catalogarse de deliberadas estrategias antisindicales. En el informe se afirma que, de hecho, el gobierno procuró en reiteradas oportunidades debilitar el poder de los sindicatos, empañar su imagen y convencer a los trabajadores de no afiliarse a ellos.

En el informe se subraya asimismo el persistente nivel de discriminación que sufren las mujeres, los negros y las poblaciones indígenas, tanto en el acceso al empleo como en lo referente a remuneración. Además, en el informe se puntualiza que ha sido absolutamente insuficiente la respuesta del gobierno a la lucha contra las peores formas de trabajo infantil, en las que están sumidas medio millón de menores..

Ryder finalizó diciendo que: “La situación sindical existente en Colombia es motivo de gran preocupación para el movimiento sindical internacional y esperamos que la apertura de una delegación permanente de la OIT en ese país origine algunas mejoras sostenibles en la vida de millones de trabajadores y trabajadoras de Colombia.

Al 1 de noviembre, la CSI representa a 168 millones de trabajadores de 154 países y territorios y cuenta con 307 afiliadas nacionales.

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