Desempleo juvenil – una “bomba de tiempo social”

La CSI califica los elevados niveles de desempleo juvenil a escala mundial, que siguen en aumento, como una “bomba de tiempo social” que amenaza con destruir la estructura social, económica y política de los países en el mundo entero. Nuevas cifras publicadas por la Organización Internacional del Trabajo hoy, declarado por Naciones Unidas como Día Internacional de la Juventud, ponen de relieve el dramático incremento en el número de jóvenes desempleados conforme continúa agravándose el impacto de la crisis económica mundial sobre el empleo.

“Más de 80 millones de jóvenes no tienen hoy en día trabajo y muchos millones más se encuentran atrapados en empleos a corto plazo, mal pagados o en la economía informal. Toda una generación de jóvenes se está quedando atrás, y las consecuencias de ello para la sociedad serán muy graves. Los Gobiernos han de actuar cuanto antes para promover la creación de empleo, manteniendo el estímulo económico mientras se necesite en lugar de aplicar recortes en el gasto público”, indica la Secretaria General de la CSI, Sharan Burrow.

Aunque el desempleo juvenil ha venido aumentando de manera constante desde hace más de una década, el informe de la OIT indica que la crisis económica ha ocasionado un incremento explosivo en la tasa de desempleo juvenil, con otros 8 millones de jóvenes sin trabajo entre 2007 y 2009, lo que hace que el porcentaje global se sitúe en el 13%. El informe analiza la situación en los países industrializados y las economías emergentes, que tienen los niveles más altos jamás registrados, así como en el mundo en desarrollo, donde el creciente desempleo juvenil se ve agravado por cerca de 152 millones de jóvenes entre los “pobres que trabajan”, atrapados en la más extrema pobreza.

Aún cuando la situación mundial del empleo empiece a mejorar, es probable que el desempleo se reduzca de manera menos marcada entre los jóvenes que para los demás trabajadores, y el modelo de trabajo a corto plazo, a tiempo parcial y precario para aquellos jóvenes que consiguen encontrar trabajo persistirá a menos que los Gobiernos actúen de manera decidida. El impacto económico y social a largo plazo que tiene un alto nivel de desempleo juvenil está muy bien documentado, y el daño ocasionado por la actual crisis a la cohesión social sin duda será intenso y duradero.

“En todo el mundo, los sindicatos están presionando a los Gobiernos para que adopten políticas macroeconómicas que den prioridad al empleo, así como medidas específicas para mejorar el acceso de los jóvenes a empleos decentes y a una educación y formación de calidad. Los sindicatos debemos además esforzarnos más para llegar a la gente joven, situar sus preocupaciones en primer término dentro de nuestro propio programa tanto en lo que concierne a la política gubernamental como en cuanto a su protección en el mercado laboral y en el lugar de trabajo”, añadió Burrow.

Leer el informe de la OIT

Páginas de la CSI sobre los jóvenes, incluyendo el Blog de la Juventud