COP25 – Se requieren urgentemente planes de ambición climática y transición justa para hacer frente a la crisis del clima

Nos queda apenas una década para estabilizar el clima y tan solo un año para que los Gobiernos se comprometan a una mayor ambición en sus Contribuciones Determinadas a nivel Nacional (CDN) y pasar la prueba, advierten los sindicatos en la apertura de la COP25 en Madrid.

Los trabajadores y sus sindicatos han demostrado este año que son parte de la solución, parte del creciente movimiento que reclama acción por parte de los Gobiernos. Sindicatos procedentes de Chile a España, de Filipinas a Nigeria, formarán parte de la delegación sindical presente en la COP25 entre el 2 y el 13 de diciembre.

“Nos enfrentamos a una crisis climática. Una economía con cero emisiones netas y medidas de transición justa es nuestra única posibilidad de sobrevivir. Sin el diálogo social vital para lograr progresos al respecto, su impacto económico no puede sino empeorar. La codicia corporativa y la búsqueda de beneficios a cualquier precio no pueden cimentar la transición a un futuro con cero emisiones netas, y ninguna empresa puede escapar a nuestra atención”, afirmó Sharan Burrow, Secretaria General de la Confederación Sindical Internacional (CSI).

Los sindicatos reclaman empleos decentes en un planeta vivo, a través de las garantías que aportan medidas de transición justa para todos los trabajadores y trabajadoras. La COP25 ha de mostrar el compromiso de los Gobiernos mediante mayor ambición en sus CDN y apoyando la iniciativa Acción Climática para el Empleo. Una financiación adecuada para la lucha contra el cambio climático es la piedra angular de una política climática eficaz y los Gobiernos deberán cumplir su promesa de movilizar 100.000 millones de USD anuales para 2020.

“En tanto que organizaciones de trabajadores, tenemos que asumir una importante responsabilidad. El progreso social nunca ha venido regalado, sin una lucha por parte de las personas afectadas. Es también el caso en cuanto a la protección climática. Tendremos que luchar por estar en la mesa de negociación y asegurarnos de que nuestras demandas de justicia climática sean tenidas en cuenta, a través del diálogo social para una transición justa”, añadió Sharan Burrow.

Canadá, Alemania, Nueva Zelanda y España han marcado el camino con acuerdos de transición justa; Sudáfrica y Escocia establecieron organismos sobre Transición Justa; mientras que Suecia e India han registrado avances para la obtención de acero y cemento de manera más limpia.

Una economía verde podría crear 65 millones de nuevos empleos con bajas emisiones de carbono en 2030 y generar 26 billones de USD en beneficios económicos de aquí a 2030, según New Climate Economy.

Se requieren urgentemente ambición y planes de transición justa para asegurar la confianza de la gente en todos los países. Los sindicatos exigen que los Gobiernos:

  • Dejen de retrasar la aplicación de medidas y muestren mayor ambición en sus Contribuciones Determinadas a nivel Nacional (CDN)
  • Empiecen a aplicar el diálogo social, vital para lograr acuerdos que desemboquen en una transición justa para todos
  • Legislen para la acción climática, incluyendo normas de contratación
  • Se aseguren de que los Nuevos Acuerdos Verdes representen un nuevo contrato social en todos los países, con derechos laborales, ambición climática y transición justa.

“La CSI luchará para que no se deje a nadie atrás, que no se olvide a ningún trabajador o trabajadora y ninguna comunidad. Nos solidarizamos con el pueblo estadounidense, que entiende que la retirada del Acuerdo de París por parte del presidente Trump pone en peligro la capacidad mundial para estabilizar el planeta. La CSI ha manifestado claramente su opinión de que la presencia del presidente Piñera en la COP25 en Madrid podría hacer tambalearse la confianza que necesita el pueblo, confianza en que los Gobiernos actúen para proteger sus intereses. No podemos perder otra oportunidad para que los Gobiernos afronten la emergencia climática”, concluyó Burrow.

El descontento social en Chile y la respuesta represiva del Gobierno, que obligaron al presidente Piñera a cancelar la COP en Santiago, son representativos de la lucha global por la justicia social y un recordatorio de todas las vidas que se ponen en peligro adoptando políticas regresivas.

Leer el Informe Nuevos Frentes de la CSI para la COP25