Comunicado del Comité para el Desarrollo

1. El Comité para el Desarrollo se reunió el 20 de abril de 2013, en la ciudad de Washington.

2. El crecimiento económico sostenido en los países en desarrollo en el curso de la década pasada ha redundado en el logro mucho antes de lo previsto del primer objetivo de desarrollo del milenio (ODM), reducir la pobreza extrema a la mitad para el año 2015. Seguimos firmemente empeñados en el logro de los ODM e instamos al Grupo del Banco Mundial a intensificar sus esfuerzos por prestar apoyo a los países para alcanzar las metas de los ODM y participar activamente en el establecimiento de un programa amplio de desarrollo para después de 2015.

3. Persisten importantes desafíos mundiales. Si bien las perspectivas para las economías en desarrollo son alentadoras y los riesgos de que los resultados sean menos favorables que los previstos han disminuido a corto plazo, la estabilidad macroeconómica mundial aun no se ha restablecido, el desempleo continúa siendo alto y el precio de los alimentos sigue siendo volátil y afectando particularmente a los más pobres. Los conflictos y el mal gobierno obstaculizan el desarrollo en muchas regiones, y el cambio climático y los desastres naturales ponen en peligro los logros sociales y económicos. Para hacer frente a estos desafíos hacen falta respuestas eficaces de políticas nacionales, la cooperación internacional e instituciones internacionales eficaces.

4. La misión primordial del Grupo del Banco Mundial sigue siendo un mundo sin pobreza. Respaldamos la formulación de la estrategia unificada del Grupo del Banco Mundial que centrará implacablemente las actividades y recursos del Grupo en el cumplimiento de su misión. Por lo tanto aplaudimos el documento titulado Una visión común para el Grupo del Banco Mundial y ansiamos discutir la próxima estrategia del Grupo del Banco Mundial en las reuniones anuales de este año. También aplaudimos el proceso de cambio reseñado para respaldar la estrategia del Grupo del Banco Mundial, basándonos en las iniciativas de reforma en marcha y los cinco componentes, los objetivos mensurables, y la incorporación de la ciencia de la entrega y planteamientos basados en pruebas. La estrategia debería ayudar al Grupo del Banco Mundial a elevar su impacto al máximo, a ser más selectivo y a asegurar su sostenibilidad financiera.

5. Creemos que tenemos una oportunidad histórica de poner fin a la pobreza extrema en una generación y respaldamos el objetivo fijado por el Grupo del Banco Mundial en este sentido. La meta global de reducir la tasa de pobreza extrema —el porcentaje de personas que subsiste con menos de US$1,25 al día— al 3% antes de fines de 2030 es de gran escala. Para el logro de este objetivo hará falta un crecimiento sólido en todo el mundo en desarrollo, así como la transformación del crecimiento en la reducción de la pobreza en una medida nunca vista antes en muchos países de ingreso bajo. También requerirá que se superen problemas institucionales y de gestión de gobierno, y que se invierta en infraestructura y en la productividad agrícola. Instamos al Grupo del Banco Mundial a mantener su dedicación a todos los países clientes, y a prestar atención especial a los países y regiones en los que se registra la mayor incidencia de pobreza y a los Estados frágiles y afectados por los conflictos (EFC), así como a los desafíos particulares que encaran los pequeños Estados.

6. Aprobamos igualmente el objetivo del Grupo del Banco Mundial de promover la prosperidad compartida, que entrañará promover el crecimiento de los ingresos de la población de todos los países en el 40% inferior de la distribución de ingresos. Reconocemos que para un crecimiento económico sostenido es preciso reducir la desigualdad. Las inversiones que generan oportunidades para todos los ciudadanos y promueven la igualdad de género son un fin importante en sí mismas y hacen un aporte a la generación de prosperidad. La prosperidad compartida también significa centrarse en los que, aunque no sean pobres actualmente, son vulnerables a caer en la pobreza.

7. Los objetivos de poner fin a la pobreza extrema y promover la prosperidad compartida deben lograrse de manera sostenible desde los puntos de vista ambiental, social y económico. En este contexto, vale la pena prestar atención especial al cambio climático. Aplaudimos el compromiso del Grupo del Banco Mundial de colaborar con la comunidad internacional para mejorar los indicadores vinculados a la sostenibilidad ambiental. El bienestar de las generaciones actuales y futuras exige que se garantice el futuro de nuestro planeta, se asegure la inclusión social y se restrinja la deuda económica heredada por las generaciones futuras.

8. La Asociación Internacional de Fomento (AIF) reviste importancia crucial para la misión del Grupo del Banco Mundial. Celebramos el tema general de la decimoséptima reposición de los recursos de la AIF (AIF17) de elevar al máximo el impacto en el desarrollo, incluso mediante el mayor aprovechamiento de las sinergias con la Corporación Financiera Internacional (IFC) y el Organismo Multilateral de Garantía de Inversiones (MIGA), así como su concentración en el crecimiento incluyente, la igualdad de género, los EFC y la resiliencia al cambio climático, incluida la gestión de riesgos de desastres. Instamos a que se haga una sólida AIF17 y a la decidida participación de todos los miembros.

9. Nos complace la contribución del sector privado al crecimiento y la creación de empleo. Los flujos de inversión privada han aumentado como fuentes de financiamiento para el desarrollo y constituyen un factor fundamental para el logro de nuestros objetivos. Con las condiciones y la infraestructura adecuadas, y con políticas que promuevan la competencia, el espíritu empresarial y la creación de empleo, el sector privado puede respaldar la prosperidad compartida y brindar oportunidades reales a todos los ciudadanos, especialmente a las mujeres y los adultos jóvenes. Valoramos mucho el mandato de IFC y MIGA de respaldar el desarrollo de un sector privado dinámico y alentamos al Grupo del Banco Mundial a adoptar un planteamiento que abarque a todo el Grupo para aumentar su impacto en el desarrollo.

10. El Tercer Diálogo Ministerial sobre el Desarrollo Sostenible brindó la oportunidad de centrar más la atención en la sostenibilidad dentro de la perspectiva más amplia de la reducción de la pobreza. Alentamos al Grupo del Banco Mundial y al Fondo Monetario Internacional (FMI) a prestar apoyo a los países que quieren catalizar el crecimiento con un nivel bajo de emisiones de carbono y la resiliencia al cambio climático en las ciudades, intensificar los esfuerzos encaminados a una agricultura climáticamente inteligente, y racionalizar y eliminar gradualmente las subvenciones ineficientes a los combustibles fósiles que promueven el consumo antieconómico, teniendo debidamente en cuenta la accesibilidad de la energía para los pobres.

11. En las dos últimas décadas, el número de personas que viven en asentamientos urbanos aumentó de 1 500 millones a 3 600 millones. Muchas viven en zonas expuestas a desastres y riesgos climáticos, lo que plantea una amenaza urgente y directa a los esfuerzos de desarrollo. Expresamos nuestra satisfacción por las conclusiones y recomendaciones del Informe sobre el seguimiento mundial. El proceso de urbanización debe gestionarse eficazmente de modo que los barrios de viviendas precarias no abrumen a las ciudades, empeoren la pobreza urbana y frustren el logro de los ODM. También respaldamos la gestión de los riesgos de desastres y la adaptación al cambio climático en calidad de inversiones acertadas que deberían integrarse en la labor del Grupo del Banco Mundial. Esperamos con interés el informe sobre los progresos realizados en lo que hace a la aplicación de las recomendaciones de The Sendai Report: Managing Disaster Risks for a Resilient Future (Informe Sendai: Gestión de los riesgos de desastre para un futuro con capacidad de adaptación) en las próximas reuniones de la primavera boreal.

12. Nos preocupa el constante deterioro de las condiciones de vida en el Sahel y el Cuerno de África, que amenaza la estabilidad y las perspectivas de desarrollo de estas regiones. Exhortamos al Grupo del Banco Mundial a prestar asistencia a los países para escapar de los ciclos permanentes de crisis profundizando sus compromisos en materia de infraestructura, creación de empleo, reintegración social, producción agrícola y seguridad alimentaria. También alentamos al Grupo del Banco Mundial y al FMI a seguir involucrados activamente en los países de la región de Oriente Medio y Norte de África, especialmente en respaldo de las reformas de políticas. Nos sentimos complacidos con la nueva fase de la alianza con Myanmar e instamos al Grupo del Banco Mundial y al FMI a prestar un firme apoyo para acelerar el crecimiento sostenible y la prosperidad compartida. También exhortamos al Grupo del Banco Mundial a promover la integración regional y, cuando corresponda, respaldar los proyectos regionales.

13. Se prevé realizar la próxima reunión del Comité para el Desarrollo el 12 de octubre de 2013 en la ciudad de Washington.

Artículo disponible en el sitio web del FMI