Cambio de tono en la reunión conjunta de Ministros de Trabajo y de Finanzas del G20 - ¿seguirá una acción política?

El movimiento sindical internacional acoge con beneplácito las declaraciones de los Ministros de Trabajo y de Finanzas del G20 tras su primera reunión conjunta en Moscú, aunque advierte que la crisis del desempleo y la desigualdad ha alcanzado niveles críticos y requiere un plan de acción urgente para fomentar las inversiones y crear empleo.

Sharan Burrow, Secretaria General de la Confederación Sindical Internacional, indicó que la preocupación compartida sobre el empeoramiento de las perspectivas de empleo, manifestada tanto por los Ministros de Trabajo como los de Finanzas, debería constituir una advertencia a los Líderes del G20 que se reunirán en San Petersburgo en septiembre, para que elaboren un plan sobre inversión y creación de empleo.

“Tenemos más de 200 millones de personas sin empleo, previsiones de crecimiento a la baja, familias enteras que tienen dificultades para poner comida en la mesa a causa de sus bajos salarios, y sin embargo no hay un sentido de urgencia entre nuestros líderes.

“Los Líderes del G20 han de reconocer la urgente necesidad de tomar medidas para hacer frente al aumento del desempleo y la desigualdad”, afirmó Sharan Burrow.

“Año tras año, la situación económica y social de los trabajadores y trabajadoras se ha venido deteriorando; no obstante, las políticas gubernamentales de los países del G20 están fallando. El hecho de que los Ministros de Trabajo y los Ministros de Finanzas se hayan reunido constituye un primer paso para lograr que se pongan a trabajar juntos con vistas a asegurar una coherencia política, y es algo que debería continuar con la presidencia australiana del G20”, manifestó John Evans, Secretario General de TUAC.

“El incremento del desempleo y las desigualdades resulta inaceptable. La corrección a la baja de las previsiones de crecimiento para las economías del G20 y el descenso de la demanda impulsada por los ingresos están devastando nuestras economías.

“Así pues, necesitamos un compromiso claro respecto a un Plan para el Empleo y la Inversión en un crecimiento verde, inclusivo, justo y sostenible, con cambios macroeconómicos que dejen de lado la austeridad para orientarse hacia unas políticas de impulso de la demanda”, indicó John Evans.

“Mientras que las fallidas políticas de austeridad han atacado las políticas fundamentales del mercado de trabajo, los Ministros de Trabajo y de Finanzas del G20 han reconocido por primera vez que la implementación de políticas del mercado de trabajo y de inversión social, que apoyen la demanda agregada y reduzcan las desigualdades, acordando protección social, un salario mínimo y sistemas de negociación colectiva, apoyaría el crecimiento económico y el empleo. Sin embargo, en realidad muchas de las políticas estructurales aplicadas por los Gobiernos nacionales contradicen esta premisa”, continuó el Sr. Evans.

Pese a que los Ministros de Trabajo dieron muestras de su apoyo a la demanda agregada para impulsar las economías, los Ministros de Finanzas no reconocen la importancia de una recuperación centrada en las personas, lo que demuestra que aún queda mucho por hacer para lograr una auténtica coordinación de políticas. El comunicado de los Ministros de Trabajo supone un progreso respecto a los compromisos de supervisión – algo que también está ausente del comunicado conjunto.

“El mundo necesita un G20 efectivo, comprometido hacia las personas y no sólo hacia los mercados financieros. Los trabajadores y trabajadoras y sus familias esperan poder restablecer la confianza – pero esto requiere empleos. El éxito estriba en unas economías donde un empleo fuerte, salarios justos y protección social impulsen el crecimiento”, concluyó Sharan Burrow.