Bruselas, 28 de agosto de 2007: En una carta (EN) enviada al Secretario General de la ONU, Ban Ki-moon, la CSI le ha pedido al Consejo de Seguridad de la ONU que elabore una respuesta internacional firme y coordinada para la situación de Birmania, que se va deteriorando cada vez más. Los últimos informes indican que el régimen militar arrestó a unas 65 personas –entre ellas, miembros de la Liga Nacional por la Democracia y defensores de los derechos humanos- por haber participado en manifestaciones pacíficas de protesta por el reciente aumento del precio del combustible, que se quintuplicó.

“Además del peso de años de dictadura militar, el pueblo de Birmania ahora no puede ni siquiera pagar el transporte para desplazarse a fin de ganar su sustento y muchos ya no pueden tampoco comprar el combustible necesario para cocinar”, dijo Guy Ryder, Secretario General de la CSI. “Hace menos de un año, el Consejo de Seguridad de la ONU incorporó a Birmania como punto permanente de su orden del día y debe demostrar un verdadero liderazgo en esta cuestión. De no hacerlo, la situación de los trabajadores de Birmania y de sus familiares seguirá empeorando”, agregó.

Según los informes, el régimen militar ha desplegado tropas y vehículos blindados en distintos puntos de Rangún, la capital, y en otros lugares del país y se teme que el régimen haga una vez más uso y abuso de su fuerza con el fin de imponer su voluntad. En su llamamiento al Secretario General Ban, la CSI le pide que utilice su autoridad para pedirle al Consejo de Seguridad que urgentemente se reúna y discuta la situación.

La CSI, fundada el 1 de noviembre de 2006, representa a 168 millones de trabajadores de 153 países y territorios y cuenta con 305 afiliadas nacionales.

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