Un sindicato australiano defiende los derechos a la seguridad

Un sindicato australiano ha lanzado un anuncio televisivo, en una nueva fase de su campaña contra la reducción de las condiciones de seguridad laborales. El sindicato de la construcción e industrias diversas Construction, Forestry, Mining and Energy Union (CFMEU), pasa así a la ofensiva en su lucha contra la relajación de las normas de seguridad, tanto a escala federal como estatal.

Un sindicato australiano ha lanzado un anuncio televisivo en una nueva fase de su campaña contra la reducción de las condiciones de seguridad laborales.
El sindicato de la construcción e industrias diversas Construction, Forestry, Mining and Energy Union (CFMEU) pasa así a la ofensiva en su lucha contra la relajación de las normas de seguridad, tanto a escala federal como estatal. En Victoria, por ejemplo, el sindicato responde a lo que considera una degradación de las condiciones de trabajo de la agencia WorkCover —que sufre una falta crónica de personal y no ha pasado una inspección de seguridad desde diciembre de 2012— comprometiéndose a aumentar de 500 y 600 su número de representantes sindicales de salud y seguridad en el Estado, de aquí a finales de año.
Los encargados de anunciar el lanzamiento de esta segunda fase de la campaña de la CFMEU ‘Stand up. Speak out. Come Home’ fueron el Secretario Nacional de la CFMEU, Michael O’Connor y Ged Kearney, Presidenta de la central sindical ACTU.
“Cada seis minutos fallece o resulta herido un trabajador de la construcción, la industria maderera y la minería: un 50 % más que en el conjunto de las demás industrias”, afirma Michael O’Connor, de la CFMEU. “Pero, a pesar de ello, los gobiernos del país están reduciendo las protecciones de la salud y seguridad en el empleo”.
Al sindicato le preocupan especialmente las limitaciones, vigentes ya en Queensland, al derecho de entrada de los sindicatos para investigar las quejas en materia de seguridad. O’Connor afirma que el gobierno federal intenta introducir limitaciones similares en todo el país. “Estos ataques partidistas y costosos contra los sindicatos constituyen un ataque al derecho de la población a trabajar en un entorno seguro que les permita regresar sanos y salvos a casa, para estar con quien más importa”.
La Presidenta de ACTU, Ged Kearney, afirma: “Está demostrado que los sindicatos salvan vidas. En los lugares de trabajo sindicalizados se producen menos accidentes y poseen los mejores historiales de salud y seguridad de todo el mundo”.