La policía y el ejército, fuertemente armados, están ocupando la ciudad principal de Manzini y otros centros claves, están utilizando gases lacrimógenos contra los manifestantes y, según informes, las fuerzas de seguridad han estado disparando balas de verdad.

“El Rey Mswati y su reducida camarilla de compinches se han enriquecido a lo grande a lo largo de los años, mientras que el pueblo suazi se ha estado empobreciendo a causa de este régimen feudal. Ahora tratan de aferrarse al poder utilizando la violencia y la intimidación contra la abrumadora voluntad del pueblo. Swazilandia ha sufrido bastante – la comunidad internacional debe actuar con decisión y determinación para asegurarse de que se haga justicia y que la dictadura sea reemplazada por una democracia”, dijo la Secretaria General de la CS, Sharan Burrow.

COSATU, la afiliada sudafricana de la CSI, que lleva mucho tiempo apoyando el movimiento sindical de Swazilandia, y la sociedad civil, exigen democracia, han organizado hoy manifestaciones contra el régimen de Mswati en la frontera con Sudáfrica, y se han comprometido a seguir defendiendo el movimiento democrático.

“Los sindicatos de todo el mundo están consternados por este último ejemplo de dictadura que recurre a la represión y a la violencia, y mantendrán su solidaridad con el movimiento suazi a favor de la democracia y los derechos humanos”, añadió Burrow.