CSI: “La kafala está más viva que nunca en Qatar” – aunque tenga un nombre nuevo

“La esclavitud moderna va a seguir existiendo en Qatar a pesar del anuncio que se ha hecho hoy sobre una serie de reformas superficiales a la legislación laboral.

Los cambios se han diseñado para que a los empleadores les resulte más fácil contratar mano de obra migrante, pero el anuncio sigue sin abordar las múltiples violaciones de las normas internacionales del trabajo denunciadas por la Organización Internacional del Trabajo el pasado mes de marzo.

El anuncio fue hecho por funcionarios públicos y militares, sin que ningún ministro del Gobierno estuviera presente. No ofrece ninguna garantía para los trabajadores de Qatar.

No se ha precisado ningún calendario o proceso asociado a las reformas.
Los famosos visados de salida seguirán vigentes en Qatar, y a partir de ahora será el Ministerio del Interior el que decida quién puede abandonar el país. No hay la más mínima indicación sobre la suerte que les espera a los empleados de organismos públicos que permanecen retenidos en Qatar en contra de su voluntad.

No hay libertad sindical, no hay salario mínimo y no hay ningún sistema de control efectivo para garantizar el cumplimiento de las normas laborales. Ninguna de las leyes parece aplicarse a las trabajadoras del hogar.

No se ha anunciado ninguna medida en respuesta al alarmante número de muertes y accidentes laborales que se registran entre la mano de obra migrante.

Aunque la libertad de movimiento para los trabajadores deberá respetarse en todo momento, con la eliminación del “certificado de no objeción”, el empleador seguirá estableciendo los términos de los contratos y los salarios, y los empleados seguirán sin poder afiliarse a un sindicato y sin poder negociar.

En realidad, para lo único que sirven estas leyes es para dar facilidades a los empleadores a la hora de contratar personal, conforme se va expandiendo el programa de infraestructura para la Copa del Mundo.

Al parecer el Gobierno ha dicho hoy que reconoce que a los trabajadores migrantes se les debería permitir tener sindicatos. Si eso es verdad, que deje entonces de negarse a discutirlo con la CSI.”

Sharan Burrow, Secretaria General, CSI