El Informe Mundial sobre Salarios pide negociación colectiva, salarios mínimos y protección social

La CSI ha acogido con satisfacción el segundo Global Wage Report de la Organización Internacional del Trabajo (OIT). "Este informe recalca lo que los sindicatos del mundo entero no han dejado de afirmar respecto a la crisis económica y las respuestas políticas que los gobiernos requieren implementar", señaló la Secretaria General de la CSI, Sharan Burrow.

La OIT confirma que los salarios a escala mundial se han estancado durante la crisis. Excluyendo las discutibles cifras de China y haciendo el ajuste por inflación, el crecimiento salarial mundial descendió del 2,2% en 2007 a sólo el 0,8% en 2008 y el 0,7% en 2009.

Aun cuando estos promedios mundiales se mantuvieron ligeramente positivos, en realidad los salarios disminuyeron en muchos países. "Inclusive los trabajadores que conservaron su empleo durante la crisis experimentaron un estancamiento o una caída de sus salarios”, observó Sharan Burrow.

La excesiva dependencia de las exportaciones y el endeudamiento de los consumidores para el crecimiento económico han demostrado ser insostenibles. Para lograr una recuperación económica significativa, los países necesitan incrementar la demanda interna tomando como base el aumento de los salarios y una distribución más equitativa del ingreso. En su último informe sobre esta cuestión, la OIT hace hincapié en tres soluciones en el ámbito de las políticas a aplicar: una negociación colectiva incluyente, salarios mínimos legislados y programas de protección social.

Además de proporcionar nuevos datos sobre los salarios durante la crisis, el informe también presenta un análisis a largo plazo de los salarios bajos, cuya definición es que son dos tercios inferiores al salario medio de un país. Desde finales de la década de los años 1990, la incidencia de los bajos salarios ha incrementado en dos terceras partes de los países para los cuales se dispone de cifras.

Sin embargo, la OIT concluyó que los bajos salarios son mucho menos frecuentes en los países con mayores niveles de afiliación sindical. "Los sindicatos son parte de la solución, también en lo que se refiere a garantizar que los salarios suban a la par de la productividad y que esas ganancias se distribuyan de manera justa", indicó Sharan Burrow.

Para leer el informe completo (en ingles): http://www.ilo.org/global/publications/ilo-bookstore/order-online/books/WCMS_145265/lang—en/index.htm