Qatar: Acuerdo positivo entre ICM y FIFA gracias a la mediación del Gobierno suizo

La CSI acoge con beneplácito la conclusión de un acuerdo entre la Internacional de Trabajadores de la Construcción y la Madera y la FIFA, concluido gracias a la mediación del Gobierno suizo, respecto a las condiciones de los trabajadores empleados en la construcción de los estadios para la Copa del Mundo 2022 en Qatar.

Este acuerdo, al que se ha llegado tras la presentación de un caso por parte de la ICM en Suiza, donde tiene su sede la FIFA, en el marco de la aplicación de las Directrices de la OCDE para las Empresas Multinacionales, confirma una serie de compromisos efectuados por la FIFA respecto al monitoreo de las condiciones de trabajo, con el establecimiento de un órgano de supervisión en Qatar y mecanismos para atender las quejas de los trabajadores y sus condiciones laborales.

Sharan Burrow, Secretaria General de la CSI, indicó: “acogemos favorablemente los esfuerzos de mediación del Gobierno suizo, y confiamos en la plena implementación del acuerdo. Una vez más es una vergüenza para Qatar que el Gobierno de otro país tenga que intervenir en ayuda de al menos algunos de los numerosos trabajadores migrantes que se encargarán de la construcción de la masiva infraestructura para la Copa del Mundo, pero a quienes se deniegan los derechos más fundamentales consagrados en la legislación internacional.

Aunque este acuerdo únicamente cubre a unos cuantos miles de los más de dos millones de trabajadores migrantes que hay que Qatar, demuestra lo que puede hacerse, como un paso más para lograr plenos derechos para todos los trabajadores migrantes en el país. Entre tanto, el Gobierno de Qatar está haciendo todo lo posible para desviar las críticas internacionales y continúa manteniendo a su mano de obra migrante en condiciones de esclavitud moderna en virtud del infame sistema de la kafala”.

“Qatar debe abolir el sistema de la kafala y autorizar a los trabajadores a formar y afiliarse a sindicatos y a negociar colectivamente para obtener salarios y condiciones de trabajo decentes y un entorno laboral seguro. Debe además poner fin a la discriminación salarial en función de la raza, las prácticas de contratación explotadoras y asegurarse de que todos los trabajadores y trabajadoras tengan acceso a mecanismos efectivos de solución de disputas y de quejas. Un auténtico primer paso sería que Qatar ratifique el Protocolo de la OIT sobre Trabajo Forzoso de 2014”, afirmó Burrow.

La CSI insta asimismo a todas las compañías multinacionales que operan en Qatar a conducir la debida diligencia a lo largo de todas sus cadenas de suministro en el país, en línea con los Principios Rectores de Naciones Unidas sobre las Empresas y los Derechos Humanos, permitiendo a los trabajadores organizarse democráticamente dentro de las empresas, y a erradicar abusos en la contratación y el empleo de trabajadores migrantes.

Leer el comunicado de la ICM