Al fracasar en su renovado intento de coaccionar a los representantes gubernamentales y de los trabajadores para revertir décadas de dictámenes de la OIT al respecto, los representantes de los empleadores en la Comisión de Aplicación de Normas de la OIT se negaron a ratificar las conclusiones de la Comisión respecto a toda una serie de graves casos de violaciones de los derechos, incluyendo algunos casos de trabajo forzoso.
La negativa categórica de los empleadores a aceptar las conclusiones, a las que se llegó por medio de consenso, respecto a casos relativos a los derechos fundamentales de los trabajadores y trabajadoras a defender sus intereses, incluyendo el derecho a la huelga, se produjo cuando la Conferencia Internacional del Trabajo que se celebra anualmente en Ginebra se acerca a su conclusión el 12 de junio.
Sharan Burrow, Secretaria General de la CSI, afirmó que “los empleadores deben respetar el estado de derecho y reconocer que la justicia y la estabilidad que aporta el sistema de la OIT redunda en beneficio de todos. Si continúan con su fijación ideológica de cuestionar la legislación internacional, van a tener que aceptar que se recurra a la Corte Internacional de Justicia para que se pronuncie al respecto”.