Sindicatos y marcas intensifican presión sobre el gobierno de Camboya

Los sindicatos y las marcas están presionando cada vez más al gobierno de Camboya para que responda a las reivindicaciones de los trabajadores y trabajadoras de la confección en ese país.

IndustriALL Global Union, Uni Global Union y la CSI, junto con 30 marcas importantes, como H&M, Inditex, Gap, Adidas y Nike, han firmado una carta conjunta dirigida al Primer Ministro de Camboya, reiterando la importancia de resolver como asunto de urgencia la cuestión del salario mínimo. Exigen también se respeten los derechos humanos de los 21 manifestantes detenidos desde que comenzaron las protestas salariales en enero.

Se envió la carta señalada después de que los sindicatos camboyanos decidieran postergar una huelga prevista para el 12 de marzo, con el fin de dejar tiempo suficiente para iniciar un diálogo con el gobierno sobre el proceso de establecimiento del salario mínimo. Los trabajadores y trabajadoras de la confección exigen un aumento del salario mínimo, de US$100 a US$160 al mes.

Jyrki Raina, Secretario General de IndustriALL, dijo al respecto:

Los sindicatos de Camboya han mostrado buena voluntad al aplazar la huelga; ahora es el momento para que el gobierno participe en un diálogo constructivo. Los sindicatos y marcas internacionales están trabajando en forma unida para apoyar este proceso, buscando cómo poner fin al estancamiento con relación al salario mínimo. Todas las marcas deben comprometerse a pagar más a los proveedores para que así puedan sufragar el costo del aumento salarial.

Philip Jennings, Secretario General de UNI Global Union, señaló:

"Ha llegado la hora de aplicar una nueva política en Camboya, a través del diálogo y reconocimiento de las normas internacionales del trabajo. En consecuencia, hacemos un llamado, una vez más, para que el gobierno de Camboya deje en libertad inmediata a los 21 trabajadores que siguen encarcelados por el simple hecho de tener la valentía de denunciar la injusticia".

Por otra parte, Sharan Burrow, Secretaria General de la CSI, afirmó:

“En estos momentos, se está atacando gravemente la libertad de sindicación en Camboya. El gobierno ha congelado todos los nuevos registros sindicales y ha prohibido las manifestaciones públicas de apoyo a los derechos de los trabajadores, quienes enfrentan represalias en sus lugares de trabajo por ejercer este derecho fundamental. Todos queremos que se establezca una industria sostenible de la confección, y el gobierno y los empleadores deben respetar la libertad de sindicación. Los sindicatos de Camboya y de todo el mundo emprenderán campañas para procurar que los trabajadores camboyanos puedan ejercer este derecho fundamental.”

Los sindicatos y las marcas están instando al gobierno de Camboya para que cumpla, lo más pronto posible, su promesa de crear un mecanismo rápido y con amplia participación de las partes interesadas para determinar los salarios mínimos.

La carta también señala que la aprobación de la nueva ley sobre sindicatos debe cumplir con los convenios 87 y 98 de la OIT, y que ha de ser un proceso abierto y democrático para promover relaciones de trabajo eficaces.

Los sindicatos y las marcas también expresaron su grave preocupación en vista de que se ha informado que no hay nuevos registros sindicales en 2014, y que no se va a permitir ningún otro registro hasta que entre en vigencia la nueva ley.

Por otra parte, al tiempo que reconocen el derecho de los propietarios de las fábricas de pedir compensación a cualquier persona que se compruebe haber dañado en forma criminal a su propiedad, los signatarios temen que la acción legal prevista contra los sindicatos de las fábricas que sufrieron daños durante las manifestaciones "pueda agravar la situación actual, haciendo que sea más difícil encontrar soluciones constructivas".

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