Israel y Palestina: represalias y castigos colectivos alejan aún más las posibilidades de paz

Los brutales asesinatos de los jóvenes israelíes y palestinos están siendo utilizados por los extremistas para inflamar las tensiones, con el riesgo de atizar una espiral de violencia generalizada y alejando aún más las perspectivas de una solución pacífica y justa del conflicto entre Israel y Palestina, según la CSI.

El operativo “Margen Protector” de Israel, lanzado después del secuestro de los adolescentes de Hebrón, es en realidad una forma de castigo colectivo, dejando como saldo varios muertos, decenas de heridos y la demolición y el deterioro de casas palestinas. Se han detenido cientos de palestinos. La Comisión de Derechos Humanos de la ONU ha instado a “todas las partes a abstenerse de castigar a personas por delitos que no han cometido personalmente o de imponer castigos colectivos”. Asimismo, Israel ha lanzado ataques contra la Franja de Gaza en respuesta a las decenas de cohetes lanzados desde allí hacia territorio israelí en los últimos días, intensificando así la lucha.

Según informes, el Secretario General de las Naciones Unidas, Ban Ki-moon, ha expresado su preocupación a Israel por el aumento de la violencia, las detenciones masivas y las restricciones a la circulación en la Ribera Occidental.

“Estos atroces asesinatos están siendo utilizados como un pretexto para profundizar las divisiones a costa de la población. Los autores deben ser llevados ante la justicia, de acuerdo con el Estado de derecho, y los líderes políticos tienen que mostrar el valor necesario para distender las tensiones y encontrar una manera de que el Gobierno israelí y la Autoridad Palestina retornen a la mesa de negociaciones. La ocupación de los territorios palestinos debe terminar, y deben crearse las condiciones necesarias para que Palestina e Israel coexistan en paz y seguridad, de conformidad con la legitimidad del Derecho internacional”, afirmó la Secretaria General de la CSI, Sharan Burrow.